En la investigación estuvieron involucrados los participantes del Diabetes Prevention Program (DPP, programa para la detección de la diabetes), en el que participaron más de 3,200 personas con insuficiencia en la tolerancia a la glucosa, otra forma de referirse a la prediabetes.
La prediabetes es una afección en la que los niveles de glucosa en la sangre del paciente son mayores a los normales pero no lo suficientemente altos para el diagnóstico de la diabetes.
La retinopatía diabética, que comienza con cambios en pequeños vasos detrás del ojo, también se halló en el 12 por ciento de los participantes del estudio que desarrollaron diabetes tipo 2. La investigación fue financiada por el U.S. National Eye Institute.
Los hallazgos fueron presentados el domingo en las sesiones científicas anuales de la American Diabetes Association en San Diego. "Los estudios anteriores no habían definido con precisión cuando comienza la diabetes tipo 2, así que nuestra comprensión de la aparición de la enfermedad del ojo diabética ha sido limitada. Ahora sabemos que la retinopatía diabética sí ocurre en la prediabetes en un promedio de tres años luego del diagnóstico", aseguró en una declaración preparada el Dr. Richard Hamman, vicepresidente del DPP.
"Esto nos permite entender mejor el desarrollo de la retinopatía y sugiere que los cambios en el ojo podrían iniciarse más pronto y a niveles de glucosa más bajos de lo que pensábamos anteriormente", agregó Hamman, presidente del departamento de medicina preventiva y biometría de la Facultad de Medicina de la Universidad de Colorado.
La Dra. Emily Chew, del National Eye Institute, aseguró que "Estos hallazgos refuerzan la recomendación de que los pacientes a los que se les acaba de diagnosticar diabetes tipo 2 deberían ser examinados para detectar retinopatía. Recomendamos un buen control de la glucosa en la sangre, la presión sanguínea y el colesterol, así como exámenes frecuentes de la vista".