Anuncio de científicos chinos.

Nació un ternero clon resistente al mal de la vaca loca.

Una experiencia esperanzadora.

El mal de la vaca loca podría en el largo plazo tener un remedio. Científicos chinos anunciaron ayer el nacimiento del primer ternero clon que porta genes resistentes contra la encefalopatía espongiforme bovina, enfermedad conocida como el "mal de la vaca loca" que afectó a Europa a fines de los años 90, informó la agencia de noticias de China Xinhua.

El animal, que pesó 55 kilos, midió 95 centímetros y 85 de largo, nació en la provincia oriental de Shandong, una de las áreas donde China está logrando mayores avances científicos.

El ternero clon fue obtenido por investigadores del Instituto Agrocientífico de Laiyang. A través de la aplicación de una técnica de implante, los científicos introdujeron en el embrión del animal genes clonados de células de una vaca adulta.

El proyecto fue iniciado y dirigido por los investigadores Dong Yajuan y Bo Xuejin, quienes hace cinco años lograron la primera y segunda clonación exitosa de una vaca en China, dijo la agencia Xinhua.

En declaraciones a la televisión estatal, los expertos del instituto se mostraron prudentes. Y dijeron que si bien el nacimiento del animal se desarrolló sin problemas, todavía deberían realizar varias pruebas para comprobar que la clonación y la manipulación genética constituyeron un "completo éxito".

El primer caso del "mal de la vaca loca" se detectó en Inglaterra en 1986 y provocó la devastación de la industria ganadera del país. Hasta el momento, más de 20 países han informado tener animales afectados con esta enfermedad, pero China nunca ha registrado oficialmente casos.

Según cifras de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), en 2005 murieron 474 animales a causa del "mal de la vaca loca".

En el 2004 hubo 878 casos y en el 2003 se produjeron 1.646. El pico más grave, según la FAO, se registró en 1992 con miles de decenas de reces muertas.

La enfermedad, que también afecta a los seres humanos llamada Creutzfeldt-Jakob, entre 2003 y 2005 provocó en Inglaterra la muerte de 32 personas. Esto lo convierte en el país más afectado por este mal.