Expertos advierten que el exceso de confianza en estos dispositivos podría aumentar las probabilidades de un ataque fatal
Los dispositivos llamados nebulizadores caseros han resultado una bendición para el cuidado del asma. Sin embargo, un estudio reciente señala que si no se usan adecuadamente, pueden llevar a complicaciones graves del asma, incluso la muerte.
Estos medicamentos convierten los medicamentos en gotitas muy finas para inhalar. Sin embargo, los investigadores de la Universidad del Estado de Michigan concluyeron que cuando los nebulizadores de uso en el hogar no se usaban según las directrices del Programa nacional de prevención y educación sobre el asma (en inglés NAEPP), en realidad podrían contribuir a las muertes de algunos.
"La formulación y uso extendidos de los nebulizadores caseros para el asma podría tener una consecuencia indeseada de contribuir al exceso de confianza en los broncodilatadores y al uso inadecuado de esteroides inhalados", concluyeron los autores.
El resultado podría ser "un retraso consecuente en la búsqueda de atención médica durante una exacerbación aguda y un mal manejo del asma crónica", escribió el equipo de Michigan.
"Los nebulizadores caseros no son la panacea", coincidió el Dr. Jonathan Field, director de la Clínica de alergia y asma del Centro médico Bellevue de la Universidad de Nueva York en esa ciudad.
Field, que no participó en la investigación actual, aseguró que las personas que usan nebulizadores e incluso inhaladores a veces tienden únicamente a usar sus medicamentos "de rescate", también llamados broncodilatadores, cuando tienen síntomas de asma.
"Sin embargo, cuando usted está usando un broncodilatador, las cosas ya han pasado a mayores", aseguró Field. "La gente necesita entender que el asma se puede exacerbar en cualquier momento y que siempre existe el potencial para que el asma se ponga mal. Para eso existen los medicamentos preventivos, como ayuda".
Según Allergy and Asthma Network y Mothers of Asthmatics (AANMA), hasta 20 millones de estadounidenses, entre ellos alrededor de 9 millones de niños, tienen asma.
Cerca de 2 millones de estadounidenses acuden a la sala de emergencias cada año por su asma. Además, a pesar de los avances en el tratamiento, más de 4,000 personas mueren anualmente como consecuencia de las complicaciones del asma, según informa la AANIMA.
Los nebulizadores caseros son pequeñas máquinas que transforman un medicamento líquido en una niebla que puede penetrar en lo profundo de las vías aéreas.
Tanto los medicamentos de rescate como los preventivos existen de formas que pueden ser nebulizadas.
Para el estudio actual, los investigadores de Michigan examinaron todas las muertes por asma que tuvieron lugar entre 2002 y 2004 en quienes tenían entre 2 y 34 años de edad.
Durante ese periodo, 86 personas del grupo de edad especificado murieron como consecuencia del asma, 38 de las cuales eran niños. Cincuenta y dos de las personas que murieron tenían un nebulizador casero.
Los investigadores hallaron que 30 de esas personas usaron la máquina con regularidad, entre una vez a la semana y seis veces al día.
A dos de cada tres personas que usaron sus nebulizadores con regularidad se les recetaron esteroides inhalados u orales, pero sólo uno de cada tres los usaba según las indicaciones.
Cerca de la mitad de los que murieron también tenía un medidor de flujo máximo, un dispositivo para medir la función pulmonar actual.
Se supone que los pacientes de asma deben monitorear con regularidad la fortaleza de sus vías respiratorias con este dispositivo.
Si las cifras bajan más allá de cierto número (que su médico le dará a conocer según sus lecturas promedio del medidor de flujo), entonces es el momento de llamar a su médico o agregar medicamentos.
Toda esta información forma parte del plan de acción para el asma, un registro escrito de los pasos que un asmático necesita seguir cuando el asma empeore.
Los expertos aseguran que los pacientes de asma necesitan colaborar con sus proveedores de atención de la salud para diseñar su plan de acción para el asma antes de una exacerbación para poder saber exactamente qué hay que hacer.
Los investigadores hallaron que, aunque 38 de las personas que murieron tenían medidores de flujo máximo, apenas 8 los usaron a diario. Apenas 9 de cada 52 personas que tenían nebulizadores habían diseñado planes de acción para el asma.
Los hallazgos fueron presentados el martes en la reunión anual de esta semana del American College of Chest Physicians en Salt Lake City.
Field aseguró que la gente que tenía nebulizadores caseros podría pensar que puede controlar su ataque de asma por sí misma.
"Cuando alguien acude a la sala de emergencia, recibe una nebulización, por lo que mucha gente piensa que si cuentan con el equipo en casa, para qué deberían acudir a emergencias".
Aún así, dijo, si la exacerbación del asma es lo suficientemente grave, la gente podría necesitar respiración mecánica y otros tratamientos.
Carol Odnoha, directora de pediatría, maternidad y neonatos del Visiting Nurse Service de Nueva York, aseguró que el exceso de confianza en los medicamentos de rescate es un problema mayor. "La mayoría de los pacientes de asma debería usar medicamentos controladores.
Previenen los ataques y evitan que esta afección pulmonar empeore", aseguró. Otro factor que podría mejorar el tratamiento del asma es un mayor uso de los planes de acción para el asma.
"Muchos pacientes de asma no cuentan con planes de acción para el asma. A veces, podría ser que el paciente no lo esté siguiendo, pero otras, el proveedor podría ser el que no lo hace", advirtió.
"El monitoreo regular de la situación del asma es clave, así que usted sabe que cuando está empeorando, es hora de actuar", agregó.