La anestesia espinal no causa ni empeora el síndrome de piernas inquietas.
Esa es la conclusión de un nuevo estudio publicado como una carta al editor de la edición del 20 de noviembre de la revista New England Journal of Medicine. El estudio comparó a personas que se sometieron a anestesia general con aquellas que se sometieron a cirugía bajo anestesia espinal, y no encontró diferencias en los síntomas del síndrome de piernas inquietas entre ambos grupos.
"Nuestro estudio fue diseñado para evaluar la hipótesis de que la anestesia espinal empeoraría los síntomas del síndrome de piernas inquietas", apuntó el autor principal del estudio, el Dr. Thomas Crozier, profesor asociado de anestesiología de la Facultad de medicina de la Universidad de Gottingen, en Alemania. "Esto es importante, porque el síndrome de piernas inquietas es una afección muy desagradable que afecta a hasta el diez por ciento de la población", añadió.
El síndrome de piernas inquietas (SPI) es un trastorno que provoca que las personas sientan una necesidad imperante de mover sus piernas, sobre todo cuando están recostadas. Un estudio observacional de 2002 había sugerido que la anestesia espinal era responsable del síndrome de piernas inquietas temporal tras la cirugía, señalaron los investigadores.
"El estudio del que surgió éste encontró un SPI de nuevo inicio que duraba seis semanas y luego se calmaba", apuntó el Dr. Sam Awada, jefe de medicina familiar en el Hospital St. John Macomb-Oakland en Warren, Michigan.
El estudio actual incluyó a 359 personas que se sometieron a cirugía. 147 recibieron anestesia espinal, y los demás 212 anestesia general. 32 personas dijeron que tenían síntomas de SPI antes del inicio del estudio.
Los voluntarios del estudio completaron cuestionarios antes de la cirugía, y nuevamente a la semana y a las cuatro semanas después de la misma.
Nadie en ninguno de los grupos reportó síndrome de piernas inquietas de nuevo inicio, y nadie que tenía SPI al inicio del estudio reportó un empeoramiento de los síntomas.
"El síndrome de piernas inquietas que surge después de la cirugía probablemente tenga más que ver con la cirugía misma o con la inmovilización forzada del hospital", apuntó Crozier. "Pensamos que es importante que la gente que sufre de síndrome de piernas inquietas sepa que, en el peor de los casos, sólo hay una probabilidad muy pequeña de que la anestesia espinal, que es la mejor opción para una variedad de procedimientos quirúrgicos, empeore su afección", añadió.
Awada afirmó que los hallazgos del nuevo estudio son "interesantes", pero apuntó que se debe llevar a cabo mucha más investigación antes de descartar definitivamente una relación entre la anestesia espinal y el síndrome de piernas inquietas.
Otro hallazgo reciente, presentado en la reunión Neuroscience 2008 en Washington, D.C., el 16 de noviembre, relacionó el síndrome de piernas inquietas con el uso de medicamentos antialérgicos.
(FUENTES: Thomas A. Crozier, M.D., Ph.D., associate professor of anesthesiology, department of anesthesiology, emergency and intensive care medicine, University of Gottingen Medical School, Germany; Sam Awada, M.D., chief of family medicine, St. John Macomb-Oakland Hospital, Warren, Mich.; Nov. 20, 2008, New England Journal of Medicine)