Varios estudios lo confirman

Densidad mamaria, un factor clave para prevenir el cáncer

Su aumento se asocia con un riesgo mayor y es un indicador para una terapia preventiva.

Fuente: La Nación

Fabiola Czubaj, Enviada especial

SAN ANTONIO, Texas.- A medida que pasan los años, las mujeres no deberíamos ocuparnos sólo de prevenir las arrugas. Prestarle atención a un aumento anormal de la densidad mamaria -las áreas que se ven más claras en una mamografía- nos ayudará ni más ni menos que a prevenir el cáncer de mama.

En general, la densidad del tejido mamario disminuye con la edad, especialmente a partir de la menopausia. "Se mantiene bastante estable hasta alrededor de los 45 años y entonces empieza a decaer hasta aproximadamente los 65 años. Esas células son reemplazadas por tejido graso", explicó el doctor Jack Cuzick, director del Centro Británico de Investigación Oncológica para la Epidemiología, la Matemática y las Estadísticas, de Londres.

Aunque es importante tener en cuenta que la densidad puede enmascarar los tumores pequeños, que son los que tienen mayor posibilidad de curación, el principal riesgo a tener en cuenta es un dato que se repitió casi en cada presentación realizada durante el 31° Simposio sobre Cáncer de Mama, en esta ciudad.

"La densidad está básicamente asociada con una mayor cantidad de cánceres -agregó-. Es el único factor conocido de riesgo mamario y, sin embargo, no se les informa habitualmente a las mujeres. Por eso, es muy importante que ellas se lo pregunten a sus médicos, ya que un radiólogo necesita entre 10 y 20 segundos para saberlo y suele estar en el informe que le envía al médico de cabecera", explicó tras presentar los resultados del estudio IBIS-1.

La investigación dirigida por Cuzick incluye más de 7000 mujeres, de entre 35 y 70 años. Todas son mujeres sanas, pero con antecedentes de dos o más cánceres de mama en la familia o hiperplasia. El estudio reveló que una reducción del 10% o más de la densidad mamaria entre 12 y 18 meses está asociado con un 63% menos de riesgo de desarrollar cualquier tipo de tumor.

A todas se les había hecho una mamografía de control, en la que a simple vista los médicos observaron un aumento anormal de la densidad del tejido mamario para la edad. A partir de ese momento, las mujeres recibieron durante un año una dosis preventiva de tamoxifeno.

"Esta es la primera vez que en cáncer de mama contamos con un indicador de riesgo similar a la presión arterial para la cardiología. Podemos dar un tratamiento preventivo sin tener que cruzar los dedos para esperar algún efecto porque realmente lo obtenemos en un año o año y medio", resumió Cuzick.

Sospecha confirmada

Para determinar por qué a mayor densidad mamaria, mayor riesgo de cáncer, oncólogos de la Clínica Mayo analizaron muestras de tejido mamario normal y denso de 60 voluntarias. Los resultados confirmaron las sospechas de varios expertos: el tejido denso no sólo contiene una composición epitelial, conectiva y grasa distinta del tejido normal, sino que también posee una mayor cantidad de enzimas (aromatasa) formadoras de estrógeno.

"Estos estudios son los primeros que examinan las áreas de tejido denso de mujeres sanas. Esto es muy importante porque la mayoría de los estudios previos sobre la densidad mamaria habían utilizado muestras de mujeres con cáncer", comentó la doctora Karthik Ghosh, que dirigió uno de los estudios al respecto.

Las diferencias entre la calidad de ambos tejidos fue significativa. Las áreas densas de las muestras analizadas tenían mucha menos grasa (30%) y más epitelio (6%) y estroma (64%) que las muestras no densas, cuya composición incluía un 80% de grasa, menos del 1% de epitelio y un 20% de tejido conectivo.

"Esto demuestra que tanto el epitelio como el estroma, o tejido conectivo, aumentan la densidad mamaria, y sugiere que esa gran diferencia en el nivel de estroma en el tejido mamario denso tendría un papel importante en el riesgo de cáncer de mama", agregó Ghosh.

La doctora Celine Vachon, que realizó otro estudio al respecto, comentó que la mayor cantidad de aromatasa en las células del tejido conectivo de las áreas densas "explicaría por qué las mujeres con mayor porcentaje de densidad mamaria tienen más riesgo de desarrollar cáncer que las mujeres con un bajo o nulo porcentaje de densidad".