Sebastián A. Ríos
Navegar en Internet puede ser adictivo, eso todos lo sabemos. Pero ¿quiénes tienen más riesgo de caer en la red de redes y no poder salir? Esa es la pregunta que guió un estudio realizado sobre casi 2300 adolescentes, cuya vida en la Web fue monitoreada durante dos años. En ese período, uno de cada diez jóvenes estudiados desarrolló algún grado de adicción a Internet.
Las conclusiones del trabajo, publicadas recientemente en la revista especializada Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine, revelan que son los adolescentes que padecen déficit de atención con hiperactividad (ADHD, según sus siglas en inglés), fobias sociales o depresión, o que manifiestan conductas hostiles, los que tienen más probabilidades de quedar atrapados en la Web.
El estudio, además, halló diferencias entre ambos sexos: "El análisis reveló que la hostilidad y el déficit de atención son los factores de riesgo más significativos de atención son los factores de riesgo más significativos de la adicción a Internet entre los varones y las mujeres, respectivamente", escribieron los autores del estudio, que fue conducido por el doctor Chih-Hing Ko, del Hospital Universitario Médico Kaohsiung, de Taiwan.
Según un informe que recopila datos sobre Internet y las redes sociales, provisto por la agencia de medios Mindshare, el 45% de los adolescentes argentinos navega en Internet los siete días de la semana. Casi un 15% permanece conectado más de tres horas por día; un 10% navega entre 2 y 3 horas, mientras que casi el 35% (el segmento mayoritario) lo hace entre 1 y 2 horas diarias.
Chatear es la actividad predilecta por los adolescentes argentinos durante sus incursiones en la Web; el 92% lo hace con amigos y la mayoría se conecta antes de irse a dormir.
Signos de alarma
"Internet se ha convertido en una de las fuentes de información más importantes para los adolescentes -escribieron los investigadores-. Sin embargo, la adicción a Internet puede tener un impacto negativo en la performance académica, las relaciones familiares y el estado emocional de los adolescentes."
El alcance de esta adicción es, desde la masificación de la red de redes, tema de debate. Los estudios han arrojaron resultados dispares: el porcentaje de adolescentes adictos va del 1,4 al 17,9%, según la investigación que se elija.
Son varios los que han propuesto la incorporación de la adicción a Internet como una nueva categoría diagnóstica dentro de los manuales que establecen los criterios para el diagnóstico de los trastornos mentales.
"Hoy, la conducta adictiva en relación con Internet es un motivo de consulta por parte de la familia de adolescentes o de jóvenes adultos -dijo a LA NACION el doctor Roberto Sivak, docente del Departamento de Salud Mental de la Universidad de Buenos Aires (UBA)-. Pero también se ve en adultos que viven solos o que están en pareja, pero se cuelgan de Internet de madrugada, cuando sus parejas duermen, o en el trabajo."
Según este médico psicoterapeuta, los signos que pueden prenunciar una adicción a Internet en gestación son los siguientes: aumento de la irritabilidad; aislamiento social; impaciencia e intolerancia a la espera; frustración.
"Durante la adolescencia, es normal que haya vivencias de aislamiento, de fobias, rituales obsesivos o de agresividad -comentó Sivak-, pero Internet puede convertirse en una forma de tapar o encubrir las problemáticas propias del adolescente."
Ante la presencia de signos que sugieren la imposibilidad de despegarse de la Web, el psicoterapeuta recomienda "hablar sobre el tema, aunque genere conflicto, ya que el diálogo puede llevar a la aceptación de que es necesario hacer una consulta de orientación, para saber qué está pasando".
Claves
En peligro. Quienes padecen déficit de atención, depresión, fobias sociales, o manifiestan conductas hostiles tienen un riesgo aumentado de volverse adictos a Internet.
Signos de alarma. Conductas como aislarse, estar excesivamente impaciente, irritable, manifestar sentimientos constantes de frustración son característicos de la adicción a la Web.
Conectados. Estudios que han evaluado la conducta de los adolescentes argentinos frente a la pantalla muestran que el 45% navega todos los días en Internet.