WASHINGTON (Reuters).? Un estudio sobre ratones sugiere que el uso de teléfonos celulares ayudaría a prevenir algunos de los efectos devastadores sobre el cerebro que implica la enfermedad de Alzheimer, indicaron investigadores estadounidenses.
Tras una prolongada exposición a ondas electromagnéticas, como las usadas en los teléfonos celulares, ratones genéticamente modificados para desarrollar Alzheimer rindieron tan bien en una serie de pruebas cognitivas como otros roedores saludables, según publica el Journal of Alzheimer?s Disease.
Los resultados abren camino a la posibilidad de desarrollar tratamientos no farmacológicos ni invasivos para el mal, opinó el doctor Gary Arendash, de la University of South Florida y autor principal del estudio.
El equipo esperaba que la exposición a los celulares potenciara los efectos de la demencia. "Muy por el contrario ?dijo?; esos ratones se vieron protegidos si la exposición a celulares comenzaba en la adultez temprana. En cambio, si se iniciaba después de la aparición del deterioro de la memoria, lo podía revertir."
La exposición de los ratones a la ondas electromagnéticas, equivalentes a las emitidas por teléfonos celulares colocados sobre la cabeza humana, se realizó 2 horas por día, entre 7 y 9 meses. Al finalizar ese período, la exposición erosionaba la acumulación de una proteína, la beta amiloide, característica del mal. Los roedores con Alzheimer mejoraron; se les revirtió la enfermedad.
La onda electromagnética "previene la acumulación de esa proteína dañina en el cerebro ?explicó el autor?. Los datos son fascinantes para nosotros porque abren una nueva área en la neurociencia, que creemos que es la de los efectos de largo plazo de los campos electromagnéticos sobre la memoria". El equipo verá si puede acelerar nuevas etapas del estudio para comenzar los estudios sobre seres humanos.