LAURA TARDÓN
Un nuevo estudio ratifica lo que ya se venía sospechando. La infección por algunos subtipos de papilomavirus puede aumentar el riesgo de desarrollar uno de los tumores cutáneos más frecuentes, el carcinoma escamoso espinocelular, especialmente si el afectado toma fármacos inmunosupresores, como es el caso de los pacientes trasplantados.
Existen más de 100 tipos de virus del Papiloma Humano, una infección que puede provocar anomalías en las células y, en los casos más graves, cáncer, por ejemplo, de cuello uterino. Como señalan los investigadores de la Universidad de Medicina de Dartmouth (EEUU), no todos ellos se asocian con el cáncer de piel. En este trabajo, publicado en 'British Medical Journal', han encontrado evidencias de dicha relación cuando se trata del beta-papilomavirus.
La principal autora del estudio, Margaret Karagas, y su equipo analizaron las muestras de sangre de un total de 2.366 personas. De ellas, las 663 tenían carcinoma escamoso espinocelular, 898 carcinoma basocelular y 805 personas estaban sanas. El objetivo era observar la presencia o la ausencia de anticuerpos de papilomavirus en la sangre de pacientes con y sin cáncer de piel.
"Observamos que los afectados por carcinoma escamoso espinocelular tenían un riesgo de 1,4 veces mayor te presentar dos o tres subtipos de virus del Papiloma Humano, entre ellos el beta-papilomavirus. Las probabilidades aumentaban a medida que incrementaban los subtipos. Por ejemplo, si la persona tenía ocho, las posibilidades eran de 1,7", explica Margaret Karagas. Sin embargo, no se registró aumento en el grupo que padecía carcinoma basocelular.
A lo largo del artículo, los autores constatan también que el riesgo se incrementa entre los pacientes trasplantados y en aquellos que sufren una rara enfermedad genética denominada epidermoplasia verruciforme, por la que aparecen numerosas verrugas en las zonas expuestas a la radiación solar y que pueden evolucionar a cáncer de piel.
Como aclara José Carlos Moreno, vicepresidente de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) y jefe de servicio de Dermatología del Hospital Reina Sofía de Córdoba, "una verruga en la zona genital no significa que aumente el riesgo de desarrollar cáncer de piel. Realmente, es necesario que se unan los dos factores: que estén implicados determinados tipos de papilomavirus con capacidad oncogénica y que además el afectado se encuentre en un estado de inmunosupresión, por eso es más probable en enfermos trasplantados".
Hay que tener en cuenta, indica este especialista, que "la radiación ultravioleta puede producir inmunosupresión, por lo que es recomendable que los pacientes predispuestos eviten esta exposición". Y añade: "Esta relación puede ayudar en la búsqueda de vacunas efectivas (no preventivas) contra estos virus y también de nuevas terapias en pacientes prefispuestos".