Los estadounidenses están viviendo más tiempo que nunca antes. La mayoría de los que pasan de los setenta y siguen viviendo desarrollarán cataratas en algún momento.
Por eso es tan importante conocer los riesgos y síntomas de cataratas, cómo retrasar su aparición y cómo decidir cuándo es el momento de la cirugía, según explicaron en un comunicado de prensa los expertos de la Academia Estadounidense de Oftalmología (American Academy of Ophtalmology, AAO).
Según la Academia, la gente debe hacerse un examen inicial de exploración a los cuarenta, cuando las señales precoces de la enfermedad y los cambios en la visión pueden comenzar a ocurrir. Durante la visita, el oftalmólogo explicará con qué frecuencia se deben programar exámenes de seguimiento. Las personas de cualquier edad que presentan síntomas o están en riesgo de enfermedad ocular deben pedir cita con un oftalmólogo para determinar un plan de atención y seguimiento.
Entre los factores de riesgo para cataratas se encuentran los antecedentes familiares, tener diabetes, fumar, exponerse extensivamente a la luz solar, tener inflamación o lesión graves en los ojos y el uso prolongado de esteroides, sobre todo orales e inhalados en conjunto.
La gente puede reducir el riesgo de cataratas usando gafas de sol con protección UV y un sombrero de ala ancha al aire libre, además de no fumar. Los pacientes de diabetes deben controlar cuidadosamente sus niveles de glucemia con dieta, ejercicio y, si es necesario, medicamentos, según recomendó la AAO.
Si las cataratas se desarrollan de todos modos, los expertos recomendaron que se debe instar a los pacientes a informarse bien sobre cuándo considerar la cirugía, cuyo índice de éxito es superior a 95 por ciento. La decisión debe basarse en la manera como síntomas como deslumbramiento, aureolas, visión borrosa y colores reducidos, así como otros problemas relacionados con las cataratas, afectan actividades diarias como conducir o leer.
En cuanto la decisión de someterse a la cirugía para las cataratas se haya tomado, los pacientes deben asegurarse de informarle al cirujano si toman Flomax, Hytrin, Uroxatral o Cardura porque estos medicamentos pueden hacer que el iris salga de su posición habitual, lo que conduce a problemas durante la cirugía. Informar a los cirujanos acerca del uso de estos medicamentos les permite ajustar su técnica quirúrgica.
Además, los pacientes que se han sometido a LASIK o a otra cirugía refractiva por láser, deben proporcionarle a su cirujano su corrección previa a la cirugía, anotó la AAO, que a veces se conoce como tarjeta "K".
FUENTE: American Academy of Ophthalmology, news release, July 26, 2010