Es el deseo de un equipo hecho realidad, y con los estándares de calidad internacionales. El banco de sangre de cordón umbilical, que funciona en el hospital Garrahan, envió al exterior la primera unidad de células de cordón para realizar un trasplante de médula no relacionado.
En un tanque con nitrógeno líquido, esos millones de células madre capaces de dar vida en apenas 25 mililitros de sangre llegaron ayer a Italia, donde servirán para tratar a una chica con leucemia mieloide aguda, un cáncer de la sangre.
Este envío "es el resultado de la labor del equipo de un banco público de referencia nacional, que viene colectando unidades de sangre de cordón en el país desde hace tres años, y del Incucai orientada a usar las células madre para la única aplicación reconocida científicamente, como es el trasplante de médula sin donante familiar compatible", indicó el doctor Víctor Hugo Morales, director del Registro Nacional de Donantes de Células Progenitoras Hematopoyéticas (CPH), del Incucai.
Los trasplantes de médula ósea permiten tratar enfermedades, como los cánceres de la sangre y algunas enfermedades hereditarias. Cuando los pacientes no pueden encontrar un donante adecuado, se usa la sangre de cordón umbilical, que se obtiene de la placenta del bebe después del parto.
La unidad congelada viajó en un container equipado con un sistema de seguridad y de alarmas para detectar pérdidas de temperatura que pudieran alterar su calidad. La sangre había sido donada en 2009 por una mamá de Chaco; ahora, aportará 1260 millones de células nucleadas; un gran porcentaje son las CPH, que darán origen a las células sanguíneas que repoblarán la médula ósea de la receptora italiana. Los resultados del trasplante se conocerán en cien días.
El registro del Incucai coordinó el pedido y el envío de la unidad del Garrahan tras una gran cantidad de estudios de compatibilidad, cantidad y calidad de la sangre en el laboratorio a cargo de la licenciada Cecilia Gamba. Las doctoras Silvina Kuperman y María Angélica Marcos completan el equipo del banco.
"A veces, la unidad resulta altamente compatible con las características del receptor y a veces no. Esta vez, fue todo óptimo -dijo a LA NACION la doctora Ana Del Pozo, directora del Banco Público de Referencia Nacional de Sangre de Cordón Umbilical-. Logramos que las unidades almacenadas en el banco público del país sean aceptadas para un trasplante de médula en cualquier lugar del mundo. Desde el punto de vista humano, eso significa que podemos salvar una vida con la donación de una mamá de la Argentina, lo que es muy emocionante."
En mayo, durante los festejos del Bicentenario, el banco recibió una inspección de la Asociación Estadounidense para Terapias Celulares Avanzadas, que le otorgó el certificado de acreditación internacional tras un año y medio de evaluaciones de la calidad del trabajo realizado.
Fabiola Czubaj