Los corazones de los triatletas se adaptan al rigor del entrenamiento y la competencia volviéndose más eficaces, lo que sugiere que combinar entrenamiento de duración y de resistencia podría ser la mejor forma de alcanzar una salud cardiaca óptima, afirman investigadores.
Investigadores alemanes usaron IRM para examinar los corazones de 26 hombres atletas profesionales de edad promedio de 27.9 años, y un grupo de control de 27 hombres que eran activos recreativamente no más de tres horas a la semana, de edad promedio de 27.3 años.
En comparación con el grupo de control, los triatletas tenían aurículas izquierdas, y ventrículos derechos e izquierdos de mayor tamaño. Además, los ventrículos izquierdos y derechos de los triatletas tenían mayor masa muscular y grosor de las paredes. Un triatlón es una competencia de varios deportes que incluyen natación, ciclismo y carreras en sucesión.
Los investigadores también encontraron que la frecuencia cardiaca en descanso de los triatletas eran 17 por ciento más bajas que las de los hombres del grupo de control. Esto se asocia con un mayor flujo sanguíneo al corazón, y una función cardiaca más eficaz.
"Los corazones de los triatletas de nuestro estudio son más fuertes y más capaces de manejar la misma carga de trabajo con menos esfuerzo", aseguró en un comunicado de prensa de la Radiological Society of North America el investigador líder, el Dr. Michael M. Lell, profesor asociado de la Universidad de Erlangen-Núremberg.
El estudio aparece en línea y en la edición impresa de octubre de la revista Radiology.
"Las adaptaciones cardiacas en los triatletas de élite que estudiamos se caracterizaban por un aumento equilibrado en la masa muscular, el grosor de las paredes, la dilatación y la función diastólica de los ventrículos izquierdo y derecho", aseguró Lell. "Estas adaptaciones reflejan la naturaleza del entrenamiento para el triatlón, que tiene componentes tanto de duración como de resistencia".
El entrenamiento de duración incluye actividades como correr y nadar, mientras que el entrenamiento de resistencia incluye levantar pesas. Montar bicicleta combina tanto duración como resistencia, explicó Lell. El entrenamiento excesivo en resistencia o duración lleva a adaptaciones específicas del corazón, y se cree que el entrenamiento de duración extremo se relaciona con un aumento en el riesgo de eventos cardiacos repentinos.
FUENTE: Radiological Society of North America, news release, Aug. 31, 2010