Esperar a lo que opina otra persona sobre usted reducirá la velocidad de su corazón y su frecuencia cardiaca se resentirá aún más si lo rechazan, encuentra un estudio holandés.
"El rechazo social inesperado podría ser literalmente "descorazonador", como se refleja en una disminución transitoria de la frecuencia cardiaca ", escribieron los autores del estudio en un comunicado de prensa de la Association for Psychological Science (Asociación de Ciencias Psicológicas).
En el estudio, a un grupo de voluntarios se les pidió que enviaran fotografías de sí mismos y se les dijo que un grupo de estudiantes de otra universidad las verían y decidirían si les gustaba la persona que aparecía en la foto. Esto era una treta: nadie iba a ser sus fotos. Pero los voluntarios no lo sabían, así que volvieron más tarde para ver una serie de fotos de los estudiantes universitarios que aparentemente los habían juzgados y adivinar cuál había sido su opinión.
Mediante el uso de un electrocardiograma, los investigadores midieron los ritmos cardíacos de los voluntarios mientras adivinaban lo que los otros estudiantes pensaban supuestamente de ellos. (En realidad recibieron los veredictos generados por computadora).
Los investigadores encontraron que las frecuencias cardiacas de los voluntarios descendía mientras esperaban conocer el supuesto juicio. Si eran rechazados, sus frecuencias cardiacas disminuían aún más, además se redujeron de manera significativa entre los que pensaban que habían gustado a la otra persona.
Bregtje Gunther Moor y colegas de la Universidad de Ámsterdam y de la Universidad de Leiden en Holanda publicaron su estudio en línea hace poco en un avance de la próxima edición impresa de la publicación Psychological Science.
FUENTE: Association for Psychological Science, news release, Sept. 28, 2010