Por Rachael Myers Lowe
NUEVA YORK (Reuters Health) - La enfermedad de las encías se puede tratar de manera segura durante el embarazo y reduce significativamente el riesgo de parto prematuro asociado con la condición periodontal, informó un equipo de investigadores en Pennsylvania.
"El estudio puede influir" en las consideraciones de los dentistas al decidir sobre la periodontitis durante el embarazo", escribe el equipo en British Journal of Obstetrics and Gynecology.
La enfermedad periodontal, que aparece por una infección bacteriana que deteriora el tejido de las encías y produce inflamación crónica, es un problema importante en el embarazo.
Los cambios hormonales vuelven más susceptible a la mujer a desarrollarla y la terapia estandarizada con tetraciclina no está recomendada por sus riesgos para el feto en formación.
Existen evidencias sólidas de que la enfermedad de las encías aumenta el riesgo de parto prematuro.
El equipo de la doctora Marjorie Jeffcoat, de la Escuela de Medicina Dental de la University of Pennsylvania, estudió si el tratamiento de las embarazadas con enfermedad periodontal con métodos no farmacológicos reduciría el riesgo de parto prematuro.
El grupo reunió a 322 embarazadas con encías enfermas. Al azar, recibieron una terapia activa (un método agresivo de limpieza dental llamado raspado y alisado periodontal) más educación en higiene oral, o sólo educación en higiene dental.
Después del parto, a todas se les ofreció el tratamiento de la enfermedad de las encías.
Los autores no hallaron diferencias estadísticamente significativas en la cantidad de partos prematuros entre ambos grupos. El 52,4 por ciento de las mujeres no tratadas tuvo un parto antes de tiempo, lo que le ocurrió al 45,6 por ciento de la cohorte que recibió tratamiento.
Pero en un segundo análisis, cuando el tratamiento curó la enfermedad, el equipo detectó una reducción de la posibilidad de tener un parto prematuro.
En el grupo tratado, 42 ya no tenían encías inflamadas en un segundo examen dental y la separación entre las encías y los dientes no había avanzado. Ciento once mujeres siguieron con signos de enfermedad periodontal, un indicador de falta de efectividad del tratamiento.
Cuatro de aquellas 42 mujeres (el 10,5 por ciento) tuvieron un bebé prematuro, comparado con 69 casos (un 62 por ciento) entre las 111 mujeres tratadas sin resultado.
El equipo concluye que todo esto confirma que el método no farmacológico utilizado es seguro y está asociado con una reducción del riesgo de sufrir un parto prematuro.
"Los obstetras deberían derivar a sus pacientes al dentista sin tienen problemas dentales", finalizaron los autores.
FUENTE: British Journal of Obstetrics and Gynecology, publicado online el 14 de septiembre del 2010