Según un informe reciente, las aves contaminadas con la bacteria Campylobacter es la combinación de alimentos y patógenos que causa más enfermedades transmitidas por los alimentos en los EE. UU. Afectan a más de 600,000 personas al año a un costo de $1,3 mil millones.
El informe, publicado por el Instituto de Patógenos Emergentes de Florida, identifica las diez combinaciones más peligrosas de alimentos y de microorganismos que causan enfermedades en los EE. UU.
"La cantidad de peligros y la escala del sistema alimentario constituyen un reto crítico tanto para los consumidores como para el gobierno", aseguró en un comunicado de prensa de una universidad Michael Batz, jefe de programas de seguridad alimentaria del instituto y autor líder del informe.
"Las agencias gubernamentales deben trabajar juntas para dirigir efectivamente sus esfuerzos", aseguró Batz. "Si no identificamos que combinaciones de alimentos y microbios constituyen la mayor carga, desperdiciaremos tiempo y recursos y pondremos a más gente en riesgo.
Los cinco patógenos principales que causan enfermedades, Campylobacter, Listeria monocytogenes, Toxicoplasma gondii y el norovirus causan $12.7 mil millones en pérdidas cada año. Las diez principales combinaciones de alimentos y patógenos corresponden a $8 mil millones al año, según el informe.
El costo económico tiene en cuenta la productividad perdida, atención médica y complicaciones graves o discapacidades crónicas relacionadas con las enfermedades.
El informe nombra la salmonella como el principal microorganismo que causa enfermedades (con un costo superior a $3 mil millones al año), a la vez que las frutas y verduras contaminadas con la bacteria, aves, huevos y alimentos de varios ingredientes, están entre las diez combinaciones principales de alimentos y patógenos.
Entre otras combinaciones principales se encuentra la Listeria en las carnes frías y los quesos suaves, el Toxoplasma en el cerdo y la res, E. coli en la res y las frutas y verduras, y el norovirus en los alimentos de varios ingredientes.
FUENTE: University of Florida, news release, April 28, 2011