Estilo de vida y Metformina

Prevenir la diabetes tipo 2 ahorra dinero

La terapia farmacológica preventiva también ahorró dinero, pero no fue tan eficaz como los cambios en el estilo de vida.

Fuente: Medlineplus

Prevenir la diabetes tipo 2 no solo mejora la calidad de vida de un individuo, sino que también ahorra bastante dinero.

Al tratar a personas en alto riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, los investigadores redujeron los costos médicos en $2,600 por cada persona inscrita en un grupo de cambios en el estilo de vida, y en $1,500 por cada uno de los que tomaron metformina, un medicamento para la diabetes, en un periodo de diez años.

Pero cuando los ahorros en la atención médica se compararon contra los costos de las intervenciones, la metformina ahorró $30 en los diez años. La intervención en el estilo de vida costó $1,700 en el mismo periodo.

"En comparación con no hacer nada para prevenir la diabetes tipo 2, la metformina es una intervención que ahorra costos. La intervención en el estilo de vida, aunque no ahorra costos, resulta rentable", señaló en una conferencia de prensa de la Asociación Americana de la Diabetes (American Diabetes Association, ADA) el Dr. William Herman, uno de los autores del estudio y profesor de medicina y epidemiología de la Universidad de Michigan.

Herman anotó que durante el seguimiento de diez años del estudio, la intervención de estilo de vida redujo la tasa de diabetes en 34 por ciento, mientras que la metformina redujo la tasa de diabetes tipo 2 en 18 por ciento.

Herman presentó los hallazgos del estudio el martes en las Sesiones Científicas de la ADA en San Diego.

Los datos para este estudio provinieron del Programa de Prevención de la Diabetes, que incluyó a más de tres mil personas que estaban en alto riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Todos tenían sobrepeso y se consideraba que sufrían de prediabetes. También tenían factores de riesgo adicionales para desarrollar diabetes tipo 2.

Se asignó aleatoriamente a los participantes a uno de tres grupos: intervención en el estilo de vida, tratamiento con metformina o pastillas de placebo.

El grupo de intervención en el estilo de vida recibió entrenamiento individual en dieta, ejercicio y modificación conductual. La meta era perder el siete por ciento del peso corporal y hacer al menos 150 minutos de ejercicio por semana. El grupo de metformina recibió 850 miligramos del fármaco dos veces al día, y el grupo del placebo recibió pastillas inactivas dos veces al día.

La fase inicial del estudio duró tres años, y encontró que las intervenciones de estilo de vida redujeron la tasa de diabetes en 58 por ciento, mientras que la metformina redujo la incidencia de diabetes en 31 por ciento, según Herman.

Los investigadores continuaron siguiendo a los participantes del estudio durante los próximos siete años para poder evaluar los costos económicos. Herman dijo que el estudio actual no toma en cuenta si la gente siguió o no sus regímenes recetados, solo los grupos en que estuvieron inicialmente.

Cuando los investigadores revisaron los datos para evaluar cuál era el costo por año ajustado a la calidad de vida, hallaron que la metformina seguía ahorrando costos, mientras que las intervenciones en el estilo de vida requerían de una inversión.

Herman apuntó que los costos ponen a la metformina en la misma categoría de intervenciones que "se aplican comúnmente sin cuestionamientos", como la atención prenatal, las vacunas infantiles y las vacunas contra la gripe para mayores de 65 años. Las intervenciones en el estilo de vida, por otro lado, estaban en la misma categoría de costo por año de vida ajustado a la calidad que los antihipertensivos para las personas que tienen hipertensión diastólica (la cifra inferior), los medicamentos que reducen el colesterol para personas que han sufrido un ataque cardiaco, y el uso de medicamentos cardiacos conocidos como bloqueadores beta.

"Ambas son intervenciones eficaces, y ambas deben estar disponibles para los individuos en riesgo", dijo Herman.

"En la prediabetes, mientras antes intervenimos, mejor", aseguró el Dr. Joel Zonszein, director del programa clínico de diabetes del Centro Médico Montefiore de la ciudad de Nueva York. "Si esperamos hasta que alguien sufra de diabetes tipo 2, podría ser demasiado tarde. En general, resulta rentable. Tratar las complicaciones es más costoso".

Debido a que el entrenamiento individual para la intervención de estilo de vida puede ser bastante costoso, y las compañías de seguro podrían no reembolsarlo, el centro de Zonszein desarrolló clases en grupo para personas con diabetes tipo 2, que se reunían varias horas cada trimestre. Compararon a ese grupo con personas que recibieron entrenamiento individual. Los investigadores encontraron que ambos grupos pudieron mejorar su control de la glucemia a largo plazo. Los hallazgos de Zonszein fueron presentados en un póster en la reunión de la ADA.

Herman dijo que su grupo esperaba que los costos de la intervención en el estilo de vida se redujeran, probablemente a través de intervenciones grupales en lugar de entrenamiento individual.

"Hacer intervenciones de estilo de vida con grupos podría ser menos costoso, y tal vez sea más eficaz debido al aspecto de vinculación social", comentó.

FUENTES: William Herman, M.D., M.P.H., professor of medicine and epidemiology, University of Michigan, Ann Arbor, Mich.; Joel Zonszein, M.D., director, clinical diabetes program, Montefiore Medical Center, New York City; June 27, 2011, press conference, and June 28, 2011, presentation, American Diabetes Association's Scientific Sessions, San Diego