Por Will Boggs
NUEVA YORK (Reuters Health) - Agregar metformina a la terapia oral con anticonceptivos ayudaría a las mujeres con síndrome de ovario poliquístico (SOP).
La combinación "tiene efectos beneficiosos sobre el endotelio vascular sin agravar la resistencia a la insulina", dijo la doctora Paulina A. Essah, de la Virginia Commonwealth University, en Richmond.
Según publica la revista Fertility and Sterility, el equipo de Essah le indició al azar a 19 mujeres tomar una dosis de metformina o placebo durante tres meses.
Además, todas tomaban 35 mcg de etinilestradiol con 0,18/0,215/0,25 mg de norgestimato (Ortho Tri-Cyclen, Ortho-McNeil), que, según los autores, es el anticonceptivo oral más recetado en Estados Unidos.
El índice de masa corporal se redujo significativamente (un 1,9 por ciento) sólo en el grupo tratado con metformina, mientras que el colesterol total aumentó significativamente (un 7,3 por ciento) sólo en el grupo de control.
La testosterona libre disminuyó de manera importante y la globulina fijadora de las hormonas sexuales aumentó significativamente sólo en el grupo tratado con metformina.
La dilatación mediada por el flujo, que es un marcador de función del endotelio vascular, aumentó un 69 por ciento con la metformina, pero no varió con el placebo, y la diferencia entre los grupos fue significativa.
La sensibilidad a la insulina y los marcadores inflamatorios no cambiaron en los grupos.
"Se necesitan estudios más grandes y prolongados, como así también estudios con anticonceptivos orales con distintos niveles de etinilestradiol y progestina para determinar el impacto de la metformina y los anticonceptivos orales combinados en la sensibilidad de la insulina y los marcadores en sangre de inflamación cardiovascular", concluye el equipo.
Essah dijo que estudiará el efecto de esa combinación durante un período más prolongado y con una dosis de metformina más alta.
"En tanto, vale la pena utilizar la combinación de metformina y anticonceptivos orales en mujeres con sobrepeso y obesidad", añadió.
FUENTE: Fertility and Sterility, 5 de julio del 2011