Por David Douglas
NUEVA YORK (Reuters Health) - El bloqueo prequirúrgico del plano transverso abdominal con infiltración de Ropivacaína mejora la recuperación posquirúrgica y la analgesia en las pacientes sometidas a una histerectomía laparoscópica, según publica la revista Obstetrics and Gynecology.
El doctor Gildasio S. De Oliveira, Jr. dijo a Reuters Health que realizar esa cirugía en centros de atención ambulatoria puede reducir gastos.
"Pero las pacientes pueden sentir mucho dolor y tener una mala recuperación. Al realizar el bloqueo transverso abdominal, las pacientes se recuperan como en otras intervenciones laparoscópicas ambulatorias (ligadura de trompas, cistectomía ovárica y procedimientos diagnósticos)", aclaró.
Hasta ahora, según el equipo de De Oliveira, de la Northwestern University, en Chicago, este enfoque analgésico no se había puesto a prueba en la atención ambulatoria.
El equipo estudió a 75 mujeres que habían recibido analgesia tradicional con midazolam y propofol, junto con rocuronio como relajante muscular.
Al azar, se les realizó una infiltración bilateral del plano transverso abdominal con ropivacaína al 0,5 por ciento, al 0,25 por ciento o solución salina, con una aguja de calibre 21.
Al final del procedimiento, las participantes recibieron hidromorfona, ketorolac, ondansetrona y metoclopramida. Luego, se les aplicó hidromorfona y paracetamol para controlar el dolor.
Durante las 24 horas posteriores a la cirugía, se evaluaron la calidad de la recuperación, según la escala QoR-40, y el nivel de dolor y de consumo de opioides. Entre las 66 pacientes evaluadas, el grupo tratado con ropivacaína tuvo una recuperación de mejor calidad y menor dolor posquirúrgico.
Los valores QoR-40, que oscilan entre 40 y 200, fueron unos 28 puntos más altos en el grupo tratado con ropivacaína que en el grupo tratado con solución salina.
Además, el grupo tratado con ropivacaína al 0,5 por ciento también necesitó menos opioides durante las 24 horas posteriores a la cirugía (15 versus 7,5 dosis equivalentes de morfina IV), y recibió el alta de la unidad de cuidados posteriores a la anestesia antes que la cohorte tratada con solución salina (75 versus 60 minutos).
Los autores observaron una relación lineal inversa entre el consumo posquirúrgico de opioides y la calidad de la recuperación.
El equipo reconoce que "la recuperación de las pacientes después de una histerectomía varía según las características individuales".
Aun así, concluye: "Estos resultados sugieren que las pacientes operadas con esta técnica tuvieron una recuperación posquirúrgica de la misma calidad que las pacientes operadas habitualmente en centros de intervención ambulatoria o con otros procedimientos quirúrgicos".
FUENTE: Obstetrics and Gynecology, diciembre del 2011