Estudio en niños de 12 años y sus familias

Salud de los hijos prediría enfermedad cardíaca futura de padres

Muchos padres, según explicó a Reuters Health, no se hacen controles médicos, pero llevan a sus hijos al pediatra.

Por Amy Norton

NUEVA YORK (Reuters Health) - Cuando los niños tienen el colesterol o la presión altos, sus padres tendrían más riesgo de desarrollar diabetes y enfermedad cardíaca, según una investigación realizada en Estados Unidos.

Un estudio sobre 519 familias de Ohio demostró que el peso, el colesterol y la presión de los niños de 12 años permitían predecir la posibilidad de que alguno de los padres desarrolle enfermedad cardíaca, hipertensión o diabetes en las tres décadas siguientes.

"Los factores de riesgo pediátricos (el colesterol, los triglicéridos y la presión) sirvieron para identificar a las familias en las que los padres tenían alto riesgo", dijo el doctor Charles J. Glueck, del Hospital Judío de Cincinnati y coautor del estudio.

Muchos padres, según explicó a Reuters Health, no se hacen controles médicos, pero llevan a sus hijos al pediatra.

En noviembre, los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos publicaron nuevas guías, en las que recomiendan controlarles el colesterol a los niños entre los 9 y los 11 años y entre los 17 y los 21 años. La Academia Estadounidense de Pediatría adhirió a esa recomendación.

Algunos críticos cuestionaron las guías y argumentaron que no existen datos sólidos de la utilidad del control del colesterol pediátrico para cuidar la salud cardíaca en el largo plazo.

"Todavía hay mucho debate sobre el tema", dijo Glueck.


ENFERMEDAD CARDIACA, ACV, DIABETES

El estudio publicado en Journal of Pediatrics incluyó a 852 alumnos de unos 12 años a los que se les controló el colesterol, la presión, los triglicéridos y el peso. Se los volvió a evaluar 26 años después, como a sus padres, que tenían alrededor de 66 años.

En el 47 por ciento de las familias, uno de los padres había tenido un infarto, un accidente cerebrovascular (ACV) o había necesitado una cirugía para eliminar una obstrucción arterial al finalizar el estudio. Y uno de los padres había desarrollado diabetes en el 37 por ciento de las familias participantes.

Además, los padres eran dos veces más propensos a tener un infarto o un ACV antes de los 60 años si su hijo había tenido presión elevada a los 12 años de edad.

La posibilidad de que los padres tuvieran problemas cardiovasculares también era más alta si sus hijos habían tenido triglicéridos o colesterol LDL o "malo" elevados.

El sobrepeso en los hijos duplicaba el riesgo de los padres de desarrollar diabetes o hipertensión.

En un estudio previo del mismo equipo, los resultados de los test en la niñez predecían el riesgo de cada niño de desarrollar cardiopatías, diabetes e hipertensión a los 30 años.

Todo esto sugiere que la pesquisa ayudaría a predecir los riesgos futuros de los niños y sus padres, aunque no hay una prueba sólida de que la pesquisa pediátrica disminuya el riesgo futuro de los niños de desarrollar diabetes o enfermedad cardiovascular.

Glueck consideró que a la mayoría de los niños con colesterol alto se los podría tratar con una dieta saludable, sin necesidad de acudir a medicación. Se estima que entre 15 y 20 niños de cada 300 en Estados Unidos tendrían colesterol alto asociado con la dieta y el estilo de vida.

Y uno de cada 300 o 500 niños tiene una forma hereditaria de colesterol elevado llamada hipercolesterolemia familiar, que favorece la aparición de enfermedad cardíaca a los 40 ó 50 años. Esos niños sí podrían recibir estatinas, los fármacos más populares del mundo, que ayudan a reducir el colesterol.

FUENTE: Journal of Pediatrics, online 12 de enero del 2012