Por Genevra Pittman
NUEVA YORK (Reuters Health) - Para el tratamiento de las hernias sin dolor, optar por la espera vigilada en lugar de la cirugía inmediata no causaría complicaciones a largo plazo.
Aun así, muchos pacientes que optan por el enfoque expectante de las hernias inguinales terminan en el quirófano cuando crecen demasiado o empiezan a causar dolor.
"Lo más importante es que no tendrían complicaciones a cambio de esperar", dijo el doctor Robert Fitzgibbons, cirujano de la Facultad de Medicina de la Creighton University, en Nebraska, Estados Unidos.
"Siempre se dijo que cuanto más se esperaba, más difícil sería reparar la hernia. Pero no sería así", agregó el especialista en hernias ajeno al estudio.
Un equipo combinó los resultados de los estudios de dos equipos, incluido el de Fitzgibbons, que habían comparado los resultados en el corto y largo plazo en hombres con hernias sin síntomas.
Al azar, se los había tratado con cirugía inmediata o espera vigilante (las hernias inguinales son más comunes en los hombres que en las mujeres).
Los estudios revisados habían incluido a unos 1.700 hombres y el seguimiento había durado uno o dos años a partir del enfoque terapéutico utilizado inicialmente.
Los coautores Hagar Mizrahi y Michael Parker, del Hospital del Valle Darent, en Kent, el Reino Unido, hallaron que independientemente de la estrategia inicial para el manejo de la hernia, los hombres habían sentido el mismo nivel de dolor, incluido el que altera las actividades diarias.
El estado de salud general también había sido similar en el largo plazo.
Entre uno y tres cuartos de los pacientes que no habían optado por la cirugía inmediata finalmente fueron operados porque el dolor se agravó o las hernias eran muy grandes.
Menos del 1 por ciento de los que conformaban el grupo tratado con espera vigilada tuvieron que ser operados por hernias que obstruían el flujo sanguíneo a los órganos, que es uno de los principales riesgos de retrasar la cirugía y que exige una operación de emergencia.
La posibilidad de que las hernias reaparecieran después de una cirugía alcanzó al 2 por ciento de los hombres operados, según publica Archives of Surgery.
Fitzgibbons dijo que las hernias inguinales no desaparecen cuando los pacientes optan por la espera vigilada, pero que también es posible que nunca se agraven. "Extirpar una hernia es una cirugía dolorosa. La ventaja principal de retrasarla es poder evitarla", indicó.
Y las complicaciones más comunes, según precisó Mizrahi, son las infecciones y el dolor crónico, que en algunos pacientes sería más molesto que en otros.
"La espera vigilada debería considerarse para los pacientes con otras enfermedades, como las cardíacas o pulmonares, en los que la anestesia sería más insegura y las consecuencias de la cirugía podrían empeorar la salud general", consideró Mizrahi, que también pertenece al Centro Médico Haemek if Afula, de Israel.
En tanto, el enfoque menos invasivo para la reparación de las hernias permitió que los pacientes retomaran sus actividades diarias rápidamente, proporcionó alta satisfacción y redujo las recurrencias, en especial cuando las cirugías las habían realizado cirujanos experimentados, según concluye otro estudio publicado en la misma revista.
"La espera vigilada es una opción razonable" cuando la hernia no provoca molestias, concluyó Fitzgibbons.
FUENTE: Archives of Surgery, online 19 de marzo del 2012