Por Genevra Pittman
NUEVA YORK (Reuters Health) - Una sustancia preservante con mercurio no debería prohibirse como ingrediente de las vacunas, según dicen los pediatras de Estados Unidos en una recomendación que genera debate.
En su declaración, la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP, por su sigla en inglés) cita el pedido de una comisión de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que la sustancia, el timerosal, no sea considerada una fuente peligrosa de mercurio que Naciones Unidas debería prohibir.
En 1999, la preocupación de que los niños que recibían varias vacunas con timerosal recibirían demasiado mercurio en el organismo y desarrollarían autismo y otros trastornos del neurodesarrollo hizo que la AAP solicitara su retiro, a pesar de la ausencia de pruebas sólidas en ese momento.
"Fue una cuestión de precaución por falta de más información", dijo el doctor Louis Cooper, de Columbia University, Nueva York, y que no pertenecía al comité de directores de la organización en ese momento.
"Por lo tanto, se realizaron muchos esfuerzos para determinar si el timerosal provoca daño en los niños y lo importante es que, básicamente, no parece que así fuera", agregó Cooper, autor de un comentario publicado con la declaración de la AAP.
En una revisión de seguridad del 2004, por ejemplo, el Instituto de Medicina de Estados Unidos concluyó que no existían pruebas de que las vacunas con timerosal pudieran causar autismo. Un estudio de los CDC llegó a la misma conclusión en el 2010.
Excepto algunos tipos de vacunas antigripales, la sustancia no se utiliza en las vacunas que se aplican en Estados Unidos, que se distribuyen en frascos de monodosis. Y nadie cuestiona que eso deba cambiar, señaló el doctor Walter Orenstein, integrante de la Comisión de Enfermedades Infecciosas de la AAP e investigador del Centro de Vacunas de Emory, Atlanta.
Pero en los países con menos recursos, donde muchos niños todavía mueren por enfermedades que se pueden prevenir con vacunas, es más económico y sencillo utilizar frascos con dosis múltiples de vacunas contra la difteria y el tétano, por ejemplo.
El timerosal evita que el resto del contenido del frasco se contamine con bacterias u hongos cada vez que se utiliza una dosis.
Investigadores estimaron que producir vacunas sin timerosal para los países en desarrollo costaría entre dos y cinco veces más que actualmente. Además, se complicaría el transporte y la refrigeración.
La nueva declaración aparece publicada en la revista Pediatrics de la AAP.
El timerosal contiene un tipo de mercurio (etil mercurio). Su primo, el metil mercurio, está asociado con efectos tóxicos porque permanece mucho más tiempo en el organismo. Este año, la OMS dijo que el reemplazo del timerosal con una sustancia preservante alternativa podría alterar la seguridad de las vacunas y reducir la disponibilidad de algunas vacunas.
FUENTE: Pediatrics, online 17 de diciembre del 2012