By Genevra Pittman
NUEVA YORK (Reuters Health) - Un equipo de Australia determinó que unas pocas semanas después de recibir inyecciones de esteroides para aliviar el codo de tenista, los participantes de un nuevo estudio sentían menos dolor y discapacidad que aquellos tratados con placebo.
Pero, al año, los mismos pacientes tenían menos posibilidad de curarse por completo que el grupo control.
"Esto confirma que no es buena idea utilizar esteroides inyectables", dijo el doctor Allan Mishra, cirujano ortopédico de la Universidad de Stanford, quee no participó del estudio.
"Esto es importante porque la gente piensa que está bien recibir una inyección de cortisona (para el codo de tenista) y no es así. Provoca una desventaja en el largo plazo en términos de recuperación", añadió.
La enfermedad aparece por el sobreuso de los tendones del codo y se trata con antiinflamatorios no esteroides, fisioterapia y esteroides inyectables.
Hace un mes, un estudio de Dinamarca reveló que ni las inyecciones de esteroides ni las de plaquetas reducían el dolor y mejoraban la funcionalidad de los pacientes en tres meses más que las inyecciones de solución salina (ver noticia de Reuters Health del 22 de enero del 2013 en http://reut.rs/Wl9Ckw).
En ese momento, los investigadores aclararon que el seguimiento había sido corto y que los resultados serían distintos a los seis meses o al año de las aplicaciones.
Así que con un seguimiento más prolongado, Mishra opinó que el nuevo estudio muestra el daño prolongado en los tendones que pueden causar las inyecciones de corticoides.
"NO RESPALDAN" LAS INYECCIONES DE ESTEROIDES
El equipo de Bill Vicenzino, de la Universidad de Queensland, Australia, dividió al azar a 165 adultos con codo de tenista en cuatro grupos: en uno combinó las inyecciones de cortisona con fisioterapia; en otro, las inyecciones de placebo con fisioterapia; en el tercero, las inyecciones de cortisona sin fisioterapia, y en el último, las inyecciones de placebo sin fisioterapia.
Al año, no había diferencia entre los grupos en el nivel de reducción del dolor o de aumento de la funcionalidad, si habían realizado las ocho sesiones de fisioterapia indicadas.
El 83 por ciento de los que habían recibido las inyecciones de cortisona dijo que se había recuperado por completo, comparado con el 96 por ciento de los usuarios de las inyecciones de placebo, según publica el equipo en Journal of the American Medical Association.
Además, los síntomas tendían a reaparecer después de cada inyección de cortisona. El equipo estimó que un paciente sufriría de una recurrencia por cada dos o tres personas tratadas con esteroides en lugar de una inyección de solución salina.
"Estas pruebas no respaldan la práctica clínica de utilizar inyecciones de corticoesteroides para lograr una rehabilitación activa", escribe el equipo.
Las inyecciones de cortisona cuestan más de 100 dólares. Muchos casos de codo de tenista se curan solos con tiempo y ejercicios básicos de estiramiento, según comentó Mishra. "Los ejercicios en el hogar posiblemente sean suficientes -dijo-. Es posible que un paciente esté mejor con eso que con una inyección de cortisona. Con eso habría que comenzar porque quizás ni siquiera necesite fisioterapia."
FUENTE: Journal of the American Medical Association