By Genevra Pittman
NUEVA YORK (Reuters Health) - Los hombres mayores que utilizan un gel de testosterona obtendrían una mejoría de la relación músculo-grasa, pero no en su flexibilidad, resistencia e independencia.
Los participantes de un nuevo estudio, que ingresaron con niveles bajos a normales de testosterona, tenían 60 años o más y un buen rendimiento general.
Los autores aseguran que aún se desconoce cómo el uso prolongado de la hormona influiría en los adultos mayores más frágiles y propensos a enfermar.
"Existirían ciertos grupos de hombres que se beneficiarían con el uso de suplementos de testosterona o de la terapia de reemplazo hormonal", dijo la autora principal, doctora Kerry Hildreth, de la Facultad de Medicina de University of Colorado, Aurora.
"Pero ignoramos si el uso de testosterona sola o con ejercicio sumaría demasiado en los hombres sanos y con buen rendimiento físico", agregó.
Los resultados, según dijo, sugieren que la testosterona "se utiliza generalmente en los pacientes inadecuados o no proporcionaría los beneficios que los usuarios esperan".
Abbott donó el gel de testosterona utilizado, Androgel, que la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos aprobó para los hombres que no producen suficiente cantidad de la hormona (hipogonadismo).
Dado que los niveles de testosterona decaen con la edad, algunos investigadores se han preguntado si el tratamiento de hombres mayores y sanos retrasaría el cambio de la composición corporal y la pérdida de fuerza.
El equipo de Hildreth le indicó al azar a 167 hombres mayores el uso diario de un gel con testosterona o con placebo, combinado o no con ejercicio muscular tres veces por semana.
En The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, el equipo publica que el uso del gel con la hormona estuvo asociado con una disminución de 0,9 kg de la masa grasa y un aumento de 0,9 kg de la masa muscular.
El ejercicio mejoró la composición corporal, pero la testosterona más el ejercicio muscular no habría dado resultados adicionales. Y con o sin un programa físico, el gel con testosterona no mejoró la funcionalidad de los participantes en las tareas cotidianas como subir escaleras o levantarse de una silla.
AbbVie, una empresa de Abbott que comercializa Androgel en Estados Unidos, no realizó comentarios antes del cierre de esta noticia.
Hildreth comentó que los participantes toleraron el gel con testosterona. Pero comentó que aún quedan dudas sobre las consecuencias de los efectos adversos en el largo plazo, como el aumento del nivel del antígeno prostático específico o resultados anormales de los análisis clínicos.
"La gente debería utilizarlo con cuidado", recomendó la autora.
FUENTE: The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism