Robert Preidt
Los retrasos en el desarrollo mental son detectables en los niños en un plazo de seis meses tras sufrir una convulsión que dure más de 30 minutos, y esos deterioros siguen presentes un año después, halla un estudio reciente.
Investigadores británicos observaron a 54 niños que tenían entre 1 y 42 meses de edad, que habían sufrido al menos una de esas convulsiones prolongadas, conocidas como estado epiléptico convulsivo (EEC). Algunos tuvieron convulsiones con fiebre, y otros sin fiebre.
Los niños fueron evaluados en un plazo de seis semanas tras la convulsión, y una vez más un año después. Fueron comparados con niños que no sufrieron convulsiones.
Los hallazgos sugieren que el EEC se relaciona con retrasos en el desarrollo neural en un plazo de seis semanas tras la convulsión, y que esos deterioros siguen presentes tras un año, según el estudio, que aparece en la edición del 8 de abril de la revista Epilepsia.
"El hecho de que los trastornos del desarrollo neural sigan presentes un año después del episodio sugiere que el evento de EEC no tiene un efecto solo pasajero sobre el desarrollo de las capacidades mentales. El EEC podría tener un impacto más duradero sobre el desarrollo futuro a través de una reorganización más permanente de las redes cerebrales funcionales, una reorganización que podría ya haber tenido lugar cuando evaluamos a estos niños por primera vez", comentó en un comunicado de prensa de la revista la autora líder del estudio, la Dra. Marina Martinos, del Instituto de Salud infantil del Colegio Universitario de Londres.
También es posible que los deterioros del desarrollo neural estuvieran presentes antes de la convulsión, según los investigadores.
Apuntaron que se necesitan más estudios para averiguar más sobre los efectos a largo plazo del EEC sobre el desarrollo del niño.
El estado epiléptico convulsivo es una de las emergencias neurológicas más comunes en los niños. Investigaciones anteriores han mostrado que ocurre con mayor frecuencia en los tres primeros años de vida, un periodo de crecimiento y desarrollo críticos.
FUENTE: Epilepsia, news release