Por Shefali S. Kulkarni
NUEVA YORK (Reuters Health) - Los médicos más preocupados por las denuncias por mala praxis son más propensos que el resto a solicitar más estudios diagnósticos y a derivar a sus pacientes a los servicios de emergencia, aun cuando la amenaza real de un posible juicio sea muy baja.
La práctica de la llamada medicina defensiva "es una de esas cosas que todos saben que suceden, pero nadie sabe cómo controlar", dijo Michelle Mello, autora principal de un nuevo estudio y profesora de derecho y salud pública de la Facultad de Salud Pública de Harvard, Boston.
Ese problema aumenta los costos de salud, pero para poder controlarlo de manera efectiva hay que comprender mejor sus causas, según publica el equipo de Mello en Health Affairs.
Mello ya había hallado que la responsabilidad médica y la medicina defensiva explicaba el 2,4 por ciento del gasto en salud del 2008 en Estados Unidos, es decir, 55.600 millones de dólares.
Estudios previos habían relevado las conductas o el nivel de preocupación de los médicos, según comentó Emily Carrier, investigadora senior del Centro para el Estudio del Cambio del Sistema de Salud, ciudad de Washington.
El equipo de Carrier y Mello analizó 1,9 millones de prestaciones de Medicare y las respuestas de unos 3.400 médicos sobre cuáles eran sus preocupaciones relacionadas con la mala praxis. Toda la información era del 2008.
Hubo 29.000 pacientes de Medicare que habían consultado a un médico por uno de tres motivos: dolor de pecho, dolor de espalda baja o cefalea. A ninguno le diagnosticaron algún problema grave asociado con ese síntoma.
"Elegimos esos tres síntomas porque pueden indicar que existe un problema relativamente menor, pero también un problema más grave, lo que haría que un médico más temeroso solicite exámenes", dijo Carrier por correo electrónico.
El equipo organizó a los médicos según el grado de preocupación por la mala praxis (bajo, medio o alto) y cruzó esa información con las prestaciones que habían indicado.
Los pacientes con dolor de cabeza que habían concurrido a un médico con alto nivel de temor a la mala praxis eran más propensos a tener que realizarse un estudio por imágenes avanzado, como una tomografía, que los pacientes atendidos por médicos menos temerosos.
Más del 11 por ciento de los pacientes con cefalea atendidos por un médico con alto nivel de temor recibió prestaciones adicionales, comparado con el 6 por ciento de los pacientes atendidos por un médico con poco temor.
A casi el 30 por ciento de los pacientes con dolor de espalda baja atendidos por un médico con alto nivel de temor, el profesional le indicó realizar estudios por imágenes adicionales, comparado con el 18 por ciento de los pacientes atendido por un médico menos preocupado.
Pero ante los pacientes con dolor de pecho, a menor nivel de temor médico, mayor posibilidad de indicar una prueba de esfuerzo, en la que hay que correr o caminar en una cinta o tomar un medicamento para esforzar el corazón.
Para Carrier, los médicos más preocupados por la responsabilidad médica evitarían ese test y optarían por hospitalizar al paciente para hacer más evaluaciones.
El estudio mostró también que el nivel de preocupación individual por la mala praxis no varió, aun cuando los médicos ejercían en estados que limitan los reclamos por mala praxis a través de, por ejemplo, la cantidad de dinero que puede solicitar un paciente por daños.
FUENTE: Health Affairs
"Medicina defensiva"
Médicos temerosos indicarían demasiados tests
Más preocupados por las denuncias por mala praxis