'Mantén tus ojos en la carretera y tus manos en el volante'
Los conductores adolescentes pasan rápidamente de la concentración a la desconcentración mientras están al volante, y esto aumenta su riesgo de accidentes, halla un estudio reciente.
Los accidentes de coche son la principal causa de muerte de los adolescentes estadounidenses, según los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC) de EE. UU. En 2010, más de 2,500 adolescentes murieron en accidentes de coche (siete muertes al día), y los conductores adolescentes son tres veces más propensos que los conductores de a partir de 20 años a sufrir accidentes letales.
La forma de reducir ese riesgo es sencilla: prestar atención, enfatizó la Dra. Karen Sheehan, directora médica de prevención e investigación de lesiones del Hospital Pediátrico Conmemorativo de Chicago.
"Este estudio confirma que, todos debemos seguir el consejo de Los Doors, la banda de rock, en su canción 'Roadhouse Blues' (ver más abajo) hace 40 años, sobre todo los conductores novatos: 'Mantén tus ojos en la carretera y tus manos en el volante'", enfatizó Sheehan, quien no participó en el estudio.
Los conductores novatos tampoco son buenos en la detección de los peligros potenciales, planteó la autora del estudio, Charlie Klauer, líder del Grupo de Riesgo y Prevención de Lesiones de la Virginia Tech.
"Apenas comienzan a aprender las formas de manejar y negociar las distintas condiciones de tráfico", explicó Klauer. "Están aprendiendo que quitar la vista de la carretera aumenta el riesgo. Cuando hacen tareas que les obligan a quitar la vista de la carretera, están en un mayor riesgo de tener accidentes".
Klauer señaló que esas tareas distractoras incluyen los mensajes de texto, llamar por teléfono celular, buscar el teléfono celular u otros objetos, comer y ver cosas que no son esenciales para la conducción, como el paisaje.
El informe aparece en la edición del 2 de enero de la revista New England Journal of Medicine.
Las leyes de conducción que limitan las horas a las que los adolescentes pueden conducir y cuántos pasajeros pueden llevar en el coche son un paso en la dirección correcta, aseguró Klauer, al igual que las leyes para limitar el uso de los teléfonos celulares. Los padres también deben aconsejar a sus hijos sobre la eliminación de las distracciones, añadió.
Los adolescentes pueden estar demasiado confiados respecto a sus habilidades de conducción, planteó Klauer. "Pero también se trata de una falta de buen juicio y de una buena toma de decisiones", explicó. "En realidad no conocen las ramificaciones de las cosas que suceden a su alrededor, aunque les gustaría saber que sí las conocen".
Klauer apuntó que los conductores experimentados hacen todas esas actividades distractoras, pero en general esperan a que las condiciones de tráfico sean más seguras. Pero los adolescentes hacen cosas como buscar estaciones en la radio cuando pasan por una intersección.
"Los conductores novatos eligen hacer esas cosas y apartan la vista de la carretera en el peor momento posible", lamentó.
Klauer dijo que los conductores distraídos no pueden reconocer ni responder rápidamente a los peligros de la carretera, como que los coches que van delante se detengan de pronto, que coches o personas entren a la carretera de forma súbita, o los objetos en la carretera delante de ellos.
Para la nueva investigación, el equipo de Klauer comparó los resultados de dos estudios. El primero fue un estudio de un año con cien conductores entre los 18 y los 72 años de edad que tenían en promedio 20 años de experiencia de conducción. El segundo fue un estudio de 18 meses de 42 adolescentes que habían tenido sus permisos de conducir por menos de tres semanas cuando comenzó la investigación.
Los participantes de ambos estudios condujeron coches con cámaras y sensores que recolectaron datos sobre su rendimiento al conducir. Muchos conductores de ambos estudios tuvieron múltiples accidentes, o casi los tuvieron, comentó Klauer.
Los investigadores hallaron que durante los primeros seis meses del estudio, tanto los conductores experimentados como los novatos evitaron las distracciones. Pero tras siete meses, los conductores novatos eran más propensos a distraerse que los experimentados.
En los últimos tres meses del estudio, los conductores novatos tenían el doble de probabilidades de distraerse de forma arriesgada que los experimentados, hallaron los investigadores.
"Debemos lograr que los jóvenes se den cuenta de que deben reducir las distracciones, sobre todo cuando comienzan a conducir", planteó el Dr. Metee Comkornruecha, especialista en medicina adolescente del Hospital Pediátrico de Miami. Comkornruecha no participó en el estudio.
"Sabemos que los niños tienen una atención limitada, así que cuando están en la carretera, deben enfocarse en conducir", señaló.
Otro experto se mostró de acuerdo.
"Es notable que los conductores jóvenes no solo se distraen al manipular sus teléfonos, sino que parecen ser particularmente susceptibles a los accidentes por la conducción distraída en comparación con los conductores mayores más experimentados", comentó Jurek Grabowski, director de investigación de la AAA Foundation for Traffic Safety. "Al mismo tiempo, es desalentador que el uso del teléfono celular aumente a medida que estos conductores novatos obtienen más experiencia en la carretera, dado que usar un teléfono puede conducir a distracciones peligrosas al volante".
FUENTES: Charlie Klauer, Ph.D., research scientist, and leader, Teen Risk and Injury Prevention Group, Virginia Tech, Blacksburg; Karen Sheehan, M.D., medical director, injury prevention and research, Children's Memorial Hospital, and medical director, Injury Free Coalition for Kids, Chicago; Metee Comkornruecha, M.D., adolescent medicine specialist, Miami Children's Hospital; Jurek Grabowski, director, research, AAA Foundation for Traffic Safety; Jan. 2, 2014, New England Journal of Medicine.