Tras analizar drogas que producen “ruidos fantasmas” con efectos secundarios, un equipo internacional, liderado por la científica del CONICET Ana Belén Elgoyhen, identificó neurotransmisores y proteínas asociados al trastorno.
Por Bruno Geller
Un relevamiento liderado por científicos argentinos abre el camino para el posible desarrollo de terapias para los acúfenos o ruidos fantasmas.
Varios pacientes asocian el comienza del trastorno a un trauma sonoro por el uso reiterado de iPods, Mp3 y otros reproductores de música a todo volumen; a la concurrencia a una discoteca; o a un trabajo en el que no se usan protectores. En otros casos, el origen de ese “sonido fantasma” es desconocido.
El 20 por ciento de la población mundial padece esta condición y el uno por ciento en un grado severo. Éste último grupo suele experimentar trastornos de ansiedad, depresión, disfunciones cognitivas e insomnio.
Hay estrategias para aliviar los acúfenos, pero hasta la fecha no hay aprobado ningún fármaco para tratarlo. Ahora, la revista “Pharmacometrics & Systems Pharmacology” describe la identificación de neurotransmisores y enzimas que estarían involucrados en la percepción de estos sonidos que atormentan a los pacientes.
“El hallazgo podría guiar la elección de terapias farmacoterapéuticas aún no exploradas”, señaló a la Agencia CyTA la autora principal del estudio, la doctora Ana Belén Elgoyhen, directora del Laboratorio de Fisiología y Genética de la Audición en el Instituto de Investigaciones en Ingeniería Genética y Biología Molecular (INGEBI) y vicepresidenta de la Sociedad Argentina de Investigaciones en Neurociencias.
Para llegar a esos resultados, Elgoyhen y sus colegas aplicaron una metodología moderna de farmacología de redes informáticas para integrar datos a gran escala depositados en bases de datos públicas. “Integramos información de todas los fármacos reportados que producen acúfenos como efecto adverso y de sus blancos farmacológicos descriptos, llegando a un total de 1.313 pares de drogas y blancos biológicos”, puntualizó la investigadora del CONICET y también profesora adjunta del Departamento de Farmacología de la Facultad de Medicina de la UBA.
En la actualidad hay algunos tratamientos que pueden mejorar la calidad de vida de los pacientes como las terapias sonoras, counselling y algunos fármacos. “Nuestro objetivo es seguir con esta línea de investigación para poder, en algún momento, allanar el camino hacia el diseño de una terapia efectiva”, indicó Elgoyhen, quien en 2012 fue distinguida como Investigadora de la Nación Argentina.
En el estudio también participaron investigadores de la Universidad de Regensburg, en Alemania; de la Universidad de Dallas, en Estados Unidos; y de la Universidad de Otago, en Nueva Zelanda.
Por sus aportes al entendimiento de las bases moleculares de la audición la científica del CONICET Ana Belén Elgoyhen obtuvo en 2008 el “Premio L’Oréal-Unesco For Women in Science” y en 2012 fue distinguida como Investigadora de la Nación Argentina.