Mary Elizabeth Dallas
Levantarse sin sentirse descansado no es solo una molestia. Los investigadores advierten que el "sueño no restaurador" es el mayor factor de riesgo para el desarrollo de dolor generalizado en los adultos mayores.
El dolor generalizado en distintas partes del cuerpo, la principal característica de la fibromialgia, afecta al 15 por ciento de las mujeres y al 10 por ciento de los hombres mayores de 50 años, según estudio anteriores.
Para identificar los desencadenantes de ese dolor generalizado, los investigadores británicos recogieron datos demográficos, además de información sobre el dolor físico y la salud mental de más de 4,300 adultos mayores de 50 años. Unos 2,700 sufrían algo de dolor al inicio del estudio, pero ninguno tenía dolor generalizado.
Los resultados, que aparecen en la edición del 13 de febrero de la revista Arthritis & Rheumatology, muestran que el sueño sin descansar y la ansiedad, los problemas de memoria y la mala salud desempeñan un rol en el desarrollo de ese tipo de dolor.
Tres años tras el inicio del estudio, el 19 por ciento de los participantes tenían un dolor generalizado nuevo, hallaron los investigadores.
Este nuevo dolor en varias partes del cuerpo fue peor entre los que habían sufrido de algo de dolor al inicio del estudio. Y de los que tenían algo de dolor previo, el 25 por ciento sufrían de un nuevo dolor generalizado. Mientras tanto, el 8 por ciento de los que no tenían dolor al inicio del estudio tenían un dolor generalizado tres años más tarde.
"Aunque la osteoartritis se vincula con el inicio nuevo de dolor generalizado, nuestros hallazgos también hallaron que el sueño, [la memoria], la salud física y la mental de baja calidad podrían aumentar el riesgo de dolor", concluyó el líder del estudio, el Dr. John McBeth, del centro de investigación sobre la artritis de la Universidad de Keele en Staffordshire, Inglaterra.
"Se necesitan intervenciones combinadas que traten tanto el dolor en lugares específicos como el dolor generalizado en los adultos mayores", añadió McBeth en un comunicado de prensa de la revista.
Pero el aumento de la edad se vinculó con unas menores probabilidades de contraer dolor generalizado. El dolor muscular, óseo y nervioso es más común entre las personas mayores. Hasta el 80 por ciento de las personas a partir de los 65 años experimentan alguna forma de dolor a diario, según el comunicado de prensa.
Aunque el estudio encontró una relación entre dormir mal y un dolor generalizado, no demostró una causalidad directa.
FUENTE: Arthritis & Rheumatology
En los adultos mayores
Vinculan dormir sin descansar con el dolor generalizado
La ansiedad, los problemas de la memoria y la mala salud también tienen que ver, sugiere un estudio.
Fuente: Medlineplus