Por Andrew M. Seaman
NUEVA YORK (Reuters Health) - Las diferencias entre la sobrevida de los pacientes ricos y pobres que fueron operados de cáncer estarían más relacionadas con las características de los hospitales que con la riqueza o la pobreza.
Hasta los pacientes más adinerados de los hospitales de comunidades pobres tendían a evolucionar peor de una cirugía oncológica mayor que los pacientes pobres operados en los hospitales de comunidades más ricas.
"Sabemos que la población con el nivel socioeconómico más bajo tiene peores resultados, pero es muy difícil detectar los mecanismos que influyen en esos resultados", dijo el autor principal, doctor Amir Ghaferi, del Centro de Resultados y Políticas de Salud de University of Michigan, Ann Arbor.
En JAMA Surgery, su equipo publica que varios estudios habían hallado que el riesgo de morir después de una cirugía oncológica mayor está relacionado con el nivel económico.
Una gastrectomía parcial, por ejemplo, aumenta un 55 por ciento la probabilidad de morir en los pacientes pobres.
Mientras que la calidad de los hospitales se evalúa a través de las tasas de complicaciones, los autores del nuevo estudio utilizaron un indicador llamado fallo de rescate (FTR, por su nombre en inglés) que identifica a los pacientes que mueren por una complicación postquirúrgica que el hospital debió evitar con la atención adecuada.
"Cuando aparece una complicación, es muy importante la forma de detección y tratamiento", dijo Ghaferi.
Con su equipo revisó los datos de Medicare para el período 2003-2007 e identificó a unos 600.000 mayores de 65 años con una cirugía oncológica mayor. Luego, estimó su nivel socioeconómico con información del Censo de Estados Unidos.
Como en otros estudios, el equipo observó que los pacientes pobres eran los más propensos a morir y desarrollar complicaciones postquirúrgicas que los más ricos, y que un 27 por ciento de ellos había quedado registrado en la categoría FTR, comparado con el 23 por ciento de los pacientes más ricos.
En general, los más pobres eran un 20 por ciento más propensos a quedar registrados como FTR que los más ricos. La diferencia se mantuvo tras considerar otras características, como el empleo, la educación y otras enfermedades.
Pero al tener en cuenta en qué hospitales se habían realizado las cirugías, los autores hallaron que gran parte del aumento del riesgo de FTR desaparecía.
La posibilidad de registrar un FTR en pacientes de cualquier nivel socioeconómico era mayor en los hospitales de comunidades de bajos recursos que en los centros donde se atendían principalmente poblaciones más ricas.
El estudio no define qué característica de la atención hospitalaria sería la más relacionada con la tasa de FTR, pero Ghaferi aseguró que podrían influir varios factores. Agregó que un alto porcentaje del riesgo extra surge de la actitud del hospital y su personal hacia la seguridad de los pacientes.
"Me preocupa desde hace tiempo que una parte de esta diferencia se deba al acceso de los pacientes pobres a sistemas de salud de mala calidad", dijo el doctor Otis Brawley, director médico de la Sociedad Estadounidense del Cáncer, Atlanta.
"Si una persona puede elegir el hospital para operarse, debería optar por un centro que habitualmente realice la cirugía que necesita", agregó.
Brawley reconoció que las personas pobres que viven en zonas urbanas no tienen tantas opciones.
FUENTE: http://bit.ly/1cXioxH
Está asociada con las diferencias hospitalarias
La sobrevida postquirúrgica
Una gastrectomía parcial, por ejemplo, aumenta un 55 por ciento la probabilidad de morir en los pacientes pobres.