Por Kathryn Doyle
NUEVA YORK (Reuters Health) - Un programa físico de nueve meses con clases después de la escuela ayudó a niños pequeños a adelgazar y a mejorar la capacidad cardíaca y pulmonar, según revela un nuevo ensayo clínico.
Está claro que la actividad física es buena para los niños, dijo el autor principal, Naiman A. Khan, de University of Illinois, Urbana-Champaign. Pero le sorprendió la diferencia que marcó este programa.
"Observamos cómo disminuía la grasa corporal total y la grasa abdominal, y cómo en los niños que no participaron del programa aumentaba la grasa corporal total", precisó Khan.
Para su estudio, el equipo organizó al azar en dos grupos a 220 niños de ocho y nueve años. Un grupo participó del programa FITKids de 70 minutos de ejercicio moderado a intenso cinco veces por semana, durante nueve meses. El resto no participó del programa (grupo control).
Los participantes del programa realizaron 20 a 25 minutos de actividad física más 50 minutos de juegos organizados no competitivos al 55-80 por ciento de la frecuencia cardíaca máxima.
Esto es mucho más exigente que los programas utilizados en estudios previos, lo que explicaría los buenos resultados obtenidos, opinó Dianne Stanton Ward, de la Escuela Gillings de Salud Pública Global de University of North Carolina, Chapel Hill, y que no participó del estudio.
Durante el ejercicio, los niños usaban relojes para monitorear los latidos y los niveles de actividad.
A los nueve meses, ese grupo había perdido casi un 1 por ciento de grasa corporal total y más del 1 por ciento de grasa abdominal, según publica el equipo en Pediatrics.
Tanto los niños con peso normal como con sobrepeso u obesidad perdieron masa grasa, pero en los segundos, la reducción fue algo mayor.
En cambio, el grupo control acumuló una pequeña cantidad de grasa corporal en esos nueve meses y no mejoró ni empeoró su aptitud física.
El equipo "hizo muchas cosas en este estudio", como evaluar la aptitud física y la composición corporal, según indicó Ward.
Los resultados indican que la actividad física a esa edad influye en la producción de grasa corporal y modifica la aptitud física de manera evidente.
"Y los niños deben de haberse divertido, porque no tenían la obligación de concurrir", agregó al destacar que pocos niños faltaron algunos días.
Un mejor estado físico significa tener un corazón más saludable y una mayor densidad ósea. "A medida que los niños superan la prepubertad, el sedentarismo se afianza y el deseo de participar de las actividades disminuye", dijo. Eso favorece el sobrepeso.
Khan dijo que "la recomendación es que los niños realicen por lo menos 60 minutos de actividad física por día, que pueden acumular durante el día escolar".
El currículum utilizado para desarrollar el programa FITKids se diseñó para usar en las clases de educación física.
El programa está disponible para los niños del estado de Illinois desde hace seis años. Existen opciones extracurriculares similares en otras regiones del país, dijo Khan.
"Los niños están haciendo cada vez menos actividad física en la escuela", señaló. Pero no importa dónde se realice: "Ofrecerles a los niños oportunidades para estar en movimiento es beneficioso para su salud", afirmó.
FUENTE: Pediatrics