Los adolescentes que mezclan el alcohol y la marihuana son más propensos a ser peligrosos en la carretera que los adolescentes que usan solo una de las dos drogas, sugiere un estudio reciente.
Los investigadores hallaron que el uso combinado anterior de alcohol y marihuana aumentaba más el riesgo de un adolescente de recibir una multa de tráfico o de estar en un accidente, según se informa en la edición de mayo de la revista Journal of Studies on Alcohol and Drugs.
"El uso simultáneo hace una gran diferencia en el riesgo de conducir de forma insegura", advirtió la investigadora líder, Yvonne Terry-McElrath, del Instituto de Investigación Social de la Universidad de Michigan, en Ann Arbor. "Hay un aumento muy claro en el riesgo de este grupo de niños, y para el resto de nosotros en las carreteras".
Los adolescentes que usaban alcohol y marihuana a la vez tenían entre un 50 y un 90 por ciento más de probabilidades de realizar una conducción insegura que sus pares que no bebían o fumaban marihuana, reportaron los investigadores.
También tenían un riesgo más alto de multas o accidentes, en comparación con los niños que solo bebían.
"A medida que se pasaba de usar alcohol a usar alcohol y marihuana a la vez, el riesgo aumentaba", afirmó Terry-McElrath. "Hay un claro proceso de aumento en el riesgo de multas y advertencias".
Jan Withers, presidenta nacional de Mothers Against Drunk Driving (MADD), afirmó que los hallazgos son "muy preocupantes".
"Es importante que los padres tengan conversaciones continuas con sus hijos adolescentes sobre los peligros de consumir alcohol en la minoría de edad", planteó Withers. "Ese tipo de conversación abierta y comprensiva sobre los valores, reglas y consecuencias puede ayudar a los niños en una variedad de decisiones sobre si participar o no en conductas arriesgadas. Este problema es demasiado importante como para que los padres lo dejen al azar y esperen que suceda lo mejor".
Los hallazgos provienen de encuestas de más de 72,000 estudiantes de último año de secundaria de EE. UU., que se llevaron a cabo anualmente entre 1976 y 2011 a través del estudio Monitorizando el Futuro, financiado por el Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de EE. UU.
Se pidió a los adolescentes que reportaran su uso de alcohol o drogas en los 12 meses anteriores, además de si habían tenido un accidente de coche o habían recibido una multa por una infracción de tráfico.
Los adolescentes que bebían tenían un 40 por ciento más de probabilidades de admitir que habían recibido una multa de tráfico, y un 24 por ciento más de probabilidades de admitir que habían estado en un accidente de tráfico, hallaron los investigadores.
Pero los adolescentes que bebían y fumaban marihuana a la vez tenían un 90 por ciento más probabilidades de recibir una multa y un 50 por ciento más de probabilidades de tener un accidente.
Estudios anteriores han reportado que los adolescentes que usan alcohol y marihuana con frecuencia son más propensos a estar involucrados en un accidente, señalaron los autores en la información de respaldo.
"Pero esto sugiere que lo importante no es solo la frecuencia del uso de sustancias", apuntó Terry-McElrath. "Los patrones de uso de drogas también se relacionaron con el riesgo de conducción insegura".
Tanto el consumo de alcohol como el uso de marihuana han declinado en los adolescentes con el tiempo. En 2011, un tercio de los estudiantes de último año de secundario dijeron que no habían usado ninguna de las dos sustancias en el año anterior, frente al 12 por ciento en 1979.
Alrededor del 31 por ciento de los estudiantes reportaron en 2011 que solo bebían, mientras que el 13 por ciento alternaban entre el alcohol y la marihuana. Otro 21 por ciento reportó combinar el alcohol y la marihuana, al menos de forma ocasional.
"El estudio muestra que un número significativo de adolescentes reportaron usar alcohol pero no marihuana, aunque casi ninguno de ellos reportaron usar marihuana pero no alcohol", apuntó Withers.
El uso combinado de marihuana y alcohol podría afectar la conducción y el juicio de los adolescentes a un mayor grado, dijo Terry-McElrath.
Quizá también los niños que usan ambas sustancias a la vez tengan una mayor inclinación a tomar riesgos durante toda la vida.
"Como madre de una hija de 15 años, si averiguara que está consumiendo alcohol o marihuana, o peor todavía, ambas cosas, le quitaría las llaves", aseguró Terry-McElrath.
FUENTES: Yvonne Terry-McElrath, M.S.A., survey research associate, University of Michigan's Institute for Social Research, Ann Arbor; Jan Withers, national president, Mothers Against Drunk Driving; May 2014 Journal of Studies on Alcohol and Drugs.