Robert Preidt
Hasta uno de cada 10 estadounidenses que sufre un ataque cardiaco podría tener también diabetes sin diagnosticar, según un nuevo estudio.
"El diagnóstico de diabetes en los pacientes que han tenido un ataque cardiaco es importante debido al papel que juega la diabetes en las enfermedades cardiacas", afirmó la autora principal, la Dra. Suzanne Arnold, profesora asistente en el Instituto Cardiaco del Centro de EE. UU. de Saint Luke y la Universidad de Missouri en Kansas City, en un comunicado de prensa de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association, AHA).
"Al detectar y tratar la diabetes temprano, podríamos prevenir las complicaciones cardiovasculares adicionales mediante la dieta, la pérdida de peso y con cambios en el estilo de vida, además de tomando medicamentos. Otra razón importante para que se diagnostique la diabetes en el momento de un ataque cardiaco es que puede guiar los tratamientos para la enfermedad de la arteria coronaria del paciente", explicó.
Para realizar el estudio, los investigadores analizaron los datos de más de 2,800 pacientes que sufrieron un ataque cardiaco y a los que no se había diagnosticado diabetes. Los pacientes fueron tratados en 24 hospitales de los Estados Unidos.
Los investigadores descubrieron que al 10 por ciento de los pacientes les acababan de diagnosticar diabetes recientemente mientras recibían tratamiento por el ataque cardiaco. Sin embargo, menos de un tercio de esos pacientes recibieron material educativo o medicamentos para la diabetes cuando fueron dados de alta del hospital.
Los médicos no consiguieron detectar la diabetes en el 69 por ciento de los pacientes que no habían sido diagnosticados previamente, según el estudio. Los médicos tenían más de 17 veces más probabilidades de detectar la diabetes de los pacientes si comprobaban los resultados de la prueba de A1C de los pacientes durante el ataque cardiaco, y tenían incluso más probabilidades de hacerlo cuanto más altos fueran los niveles de las pruebas.
Comprobar los niveles de A1C es una prueba estándar para determinar los niveles de azúcar en la sangre en los dos o tres meses anteriores.
Seis meses después de dejar el hospital, menos del 7 por ciento de los pacientes a los que no se les detectó que tenían diabetes durante su estancia hospitalaria por un ataque cardiaco habían empezado a tomar medicamentos para la diabetes. Entre aquellos a los que se detectó la diabetes mientras estaban hospitalizados, el 71 por ciento habían empezado a tomar la medicación.
El estudio fue presentado el martes en una reunión de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association) en Baltimore. La AHA indicó que dos de cada tres personas con diabetes fallecen de una enfermedad cardiaca.
Los hallazgos presentados en reuniones se consideran preliminares hasta que se publican en una revista revisada por profesionales.
FUENTE: American Heart Association
2 de cada 3 personas diabéticos fallecen de una enfermedad cardiaca.
1 de cada 10 pacientes cardíacos podría tener diabetes sin diagnosticar
Detectar y tratar la enfermedad temprano podría evitar las complicaciones cardiovasculares, afirma la autora del estudio.
Fuente: Medlineplus