NUEVA YORK (Reuters Health)
En un grupo de 727 mujeres dentro de los 36 meses (1,4 años en promedio) de la última menstruación, el equipo del doctor S. Mitchell Harman, del Sistema de Salud de Asuntos del Veterano de Phoenix, Arizona, comparó los efectos del uso temprano de Premarin (estrógeno equino conjugado oral) o Climara (17beta-estradiol transdérmico) versus placebo.
Los autores cuantificaron el objetivo del estudio, el avance de la aterosclerosis, con la variación del grosor de la íntima media carotideo (GIMc) y el calcio coronario (CC).
El equipo accedió al GIMc a los 48 meses de 580 mujeres; 464 de ellas seguían tomando los medicamentos del estudio. En ese momento, el GIMc había aumentado por igual en los tres grupos participantes (0,0076 mm/año en promedio).
En el mismo período, el CC creció un 17,4 por ciento en las usuarias de la TRH oral, un 18,9 por ciento en las usuarias de la TRH transdérmica y un 21 por ciento en las usuarias de placebo (grupo control). Estas diferencias no son estadísticamente significativas.
Los niveles de estradiol aumentaron 138,8 pmol/L con la TRH transdérmica y 30,1 pmol/L con la TRH oral (versus placebo), mientras que los valores de estrona aumentaron aún más con la TRH oral que con la versión transdérmica (167,9 versus 52 pmol/L). Los valores de estradiol o estrona no cambiaron significativamente en el grupo control.
La TRH oral estuvo asociada con una reducción del colesterol LDL y un aumento del colesterol HDL, la proteína C-reactiva y la globulina fijadora de las hormonas sexuales (SHBG, por su nombre en inglés), según aparece publicado en Annals of Internal Medicine.
La TRH transdérmica estuvo asociada con una reducción del colesterol total y no HDL, la insulina y la resistencia a la insulina.
A los seis meses, las usuarias de placebo eran mucho más propensas que las usuarias de la TRH a padecer sofocos moderados o graves. Y a los 48 meses, ese grupo sentía más síntomas vasomotores que los otros dos grupos, aunque las diferencias perdieron relevancia estadística en las usuarias de la TRH transdérmica.
El único efecto adverso que varió significativamente entre los grupos fue el sangrado vaginal, que fue más común en las usuarias de la TRH.
"La Sociedad Norteamericana de Menopausia y otros grupos respaldan el uso de la TRH para aliviar los síntomas de la menopausia en las mujeres con bajo riesgo de sufrir complicaciones con esa terapia", indica el equipo.
"Los resultados del KEEPS coinciden con esta recomendación y aportan nueva información: en las mujeres que llegaron a la menopausia con bajo riesgo cardiovascular, cuatro años de TRH no eleva ni reduce el avance de la aterosclerosis, según lo indican los valores de GIMc o CC (...) Nuestros resultados sugieren que la TRH no pondría en riesgo ni protegería a la población estudiada."
Harman no realizó comentarios sobre el estudio.
FUENTE: http://bit.ly/1Ar31f0