Robert Preidt
Los alimentos altamente procesados conforman más del 60 por ciento de las calorías en los productos que los estadounidenses compran de forma rutinaria en los supermercados, encuentra un estudio reciente.
Esos alimentos tienden a tener más grasa, azúcar y sal que los alimentos menos procesados, señalaron los investigadores.
"En general, encontramos que los alimentos altamente procesados no solo son una parte dominante y estable de los patrones de compra de EE. UU., sino que los alimentos altamente procesados que compran las familias son más ricos en grasa, azúcar y sal, en promedio, en comparación con los alimentos menos procesados que compran", señaló en un comunicado de prensa de la Sociedad Americana de Nutrición (American Society for Nutrition) la autora del estudio, Jennifer Poti, profesora asistente de investigación de la Universidad de Carolina del Norte, en Chapel Hill.
El equipo de Poti analizó al menos un año de compras de alimentos de más de 157,000 familias entre 2000 y 2012. Los participantes estuvieron en el estudio durante un promedio de cuatro años, y colectivamente compraron 1.2 millones de artículos.
Los alimentos altamente procesados incluyeron artículos como comidas preparadas, pan blanco, galletas, chips, refrescos y dulces. Los alimentos no procesados o mínimamente procesados incluían verduras frescas o congeladas, carne fresca, leche, huevos y frijoles secos.
Entre 2000 y 2012, la proporción de calorías compradas como alimentos altamente procesados permaneció estable, entre un 61 y un 62.5 por ciento. Hubo un aumento significativo en la proporción de calorías compradas como comidas listas para calentar (como las congeladas), que alcanzó más de un 15 por ciento en 2012, encontraron los investigadores.
Los hallazgos se presentaron el sábado en la reunión anual de la Federación de Sociedades Americanas de Biología Experimental (Federation of American Societies for Experimental Biology), en Boston. Las investigaciones presentadas en reuniones se deben considerar como preliminares hasta que se publiquen en una revista revisada por profesionales.
"Muchos estadounidenses tienen opiniones y creencias muy firmes sobre los alimentos procesados", dijo Poti en el comunicado de prensa.
"Algunos los consideran como opciones sabrosas, cómodas y asequibles, mientras que otros afirman que la combinación de azúcar, sal, grasa y saborizantes de esos alimentos fomenta el comer en exceso y contribuye a la obesidad. Pero hasta ahora, en realidad no teníamos evidencia para zanjar ese debate", explicó.
Poti dijo que hay que distinguir entre los alimentos procesados y los altamente procesados.
"Es importante que cuando hablemos sobre los alimentos procesados, reconozcamos que muchos, como las verduras enlatadas o los cereales de desayuno de grano integral, contribuyen de forma importante a la nutrición y a la seguridad alimentaria. Pero los alimentos altamente procesados... sí podrían estar potencialmente relacionados con la obesidad", señaló Poti.
FUENTE: American Society for Nutrition
En los EE. UU.
Los alimentos procesados aportan el mayor número de calorías a los carritos de la compra
Esos artículos tienden a tener más grasa, azúcar y sal que la comida no procesada.
Fuente: Medlineplus