Más de la mitad de los alimentos empaquetados de venta en los supermercados que se incluyeron en un nuevo estudio contenían demasiada sal agregada, según reportaron autoridades de salud de los Estados Unidos el pasado jueves.
Esto es importante porque comer demasiada sal (sodio) es un factor de riesgo para desarrollar hipertensión arterial, según los autores del estudio, y la hipertensión arterial puede, a su vez, contribuir a las enfermedades cardiacas y los ataques cerebrales.
"Analizamos las ventas de alimentos empaquetados en los supermercados", dijo la investigadora del estudio Linda Schieb, epidemióloga en la división de prevención de enfermedades cardiacas y ataques cerebrales en el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (U.S. Centers for Disease Control and Prevention). "Lo que hallamos fue que más del 50 por ciento de esos productos superaba el contenido de sodio que los lineamientos de la FDA estipulan para etiquetarse como alimentos saludables".
Scheib señaló que de acuerdo a los lineamientos para etiquetar alimentos como saludables de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (U.S. Food and Drug Administration), los alimentos individuales, como quesos, carnes frías y pan, que quieran aseverar ser "saludables" en sus etiquetas, pueden contener solo 480 miligramos (mg) de sodio por porción. En el caso de las comidas, como platos de pasta, pizza y emparedados se permiten 600 mg.
El equipo de Schieb analizó ventas de productos en tiendas de abarrotes en 52 mercados de los Estados Unidos abarcando tres de las nueve divisiones geográficas censales del país, lo que representa alrededor de la mitad de la población nacional. El equipo no incluyó almacenes ni a Walmart, de acuerdo al estudio.
Los investigadores hallaron que más de 70 por ciento de las pizzas, los platos mixtos de pasta o los platos mixtos de carne (como pastel de carne o cerdo con salsa BBQ), así como de 50 a 70 por ciento de las carnes frías, sopas y emparedados superaban los valores correspondientes a la etiqueta de "saludables" de la FDA en cuanto a contenido de sodio.
Por otra parte, únicamente 10 por ciento de los panes, las botanas saladas y los quesos superaban los lineamientos establecidos para obtener la etiqueta de saludable, de acuerdo al informe.
Los investigadores no pudieron encontrar diferencias significativas entre los mercados estudiados en cuanto al contenido de sodio en los alimentos.
El estudio se publicó en el número de abril de la revista Preventing Chronic Disease.
De acuerdo a las Guías Alimenticias de los Estados Unidos para sus ciudadanos, se recomienda a la población general mantener su consumo diario de sal por debajo de los 2,300 miligramos, o alrededor de una cucharadita. Para personas mayores de 51 años, afroamericanos y personas con problemas de salud como hipertensión arterial, diabetes o enfermedad renal crónica, el consumo diario recomendado de sodio es de 1,500 mg o menos.
No es poca cosa, considerando que un tazón de sopa y un emparedado de pavo pueden tener alrededor de 2,200 mg de acuerdo al CDC.
"La mayoría de nuestro sodio viene de comida de restaurantes y alimentos procesados", dijo Schieb. Ambas fuentes pueden estar repletas de sodio. "Es por eso que es importante leer las etiquetas y elegir las opciones con menos sodio. Asegúrese de comer también frutas y verduras", añadió.
Los hallazgos no sorprendieron a Connie Diekman, dietista certificada y directora de nutrición universitaria en la Universidad Washington en San Luis.
"Los alimentos empaquetados siguen siendo altos en sodio debido al papel que este juega en la conservación, así que el hecho de que los productos que se estudiaron superaran la cantidad 'saludable' no es sorprendente", dijo. Sin embargo, añadió que las cosas pueden haber mejorado desde que el equipo de Schieb recabo los datos en 2009, pues los fabricantes de alimentos han estado intentando reducir el sodio.
Ambas expertas coincidieron en que los consumidores pueden tomar medidas para reducir su ingesta de sodio. Leer las etiquetas y comparar el contenido de sal entre distintos alimentos es una forma de hacerlo. Realizar algunas comparaciones durante las compras le podría ahorrar muchos miligramos de sodio por porción.
Otra manera de reducir los niveles de sal es limitar su consumo de alimentos empaquetados. Utilice los alimentos empaquetados cuando los necesite, como el pan para los emparedados, comentó Diekman. Pero luego use carnes recién cocidas en lugar de salame, mortadela u otras carnes procesadas que normalmente tienen altos contenidos de sodio, continuó.
Diekman también recomendó como alternativa utilizar los alimentos empaquetados únicamente como base. Puede agregar vegetales frescos o congelados a los macarrones con queso empacados, por ejemplo. Puede repartir el sodio en más alimentos, reduciendo el consumo de sodio por persona.
"Considere comer en casa más seguido pues los restaurantes que atienden rápidamente suelen servir alimentos con mayor contenido de sodio y salan los alimentos para el consumidor promedio, que frecuentemente es más de lo que necesita el paladar", dijo Diekman.
Al cocinar en casa, añadió, utilice la sal conforme cocina o en la mesa, pero no en ambos lugares. Experimente con otros sazonadores para poder reducir la sal sin perder el sabor. El limón y las especias son dos ejemplos que mencionó.
FUENTES: Connie Diekman, dietista certificada, M.Ed. y directora de nutrición universitaria en la Universidad Washington en San Luis; Linda Schieb, M.S.P.H. epidemióloga en la división de prevención de enfermedades cardiacas y ataques cerebrales en el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (U.S. Centers for Disease Control and Prevention), en Atlanta; Preventing Chronic Disease