Su salud podría verse afectada

¿Trabaja todo el día de pie?

Experimentar fatiga en las extremidades inferiores a diario podría tener consecuencias a largo plazo.

Fuente: MedlinePlus

Trabajar en un escritorio no es bueno para la salud, pero trabajar de pie todo el día podría también conllevar problemas, señalan unos investigadores.

Estar de pie cinco horas al día contribuye a una fatiga muscular significativa y prolongada en las extremidades inferiores, concluyó un estudio de tamaño reducido. Esto podría aumentar el riesgo de dolor de espalda y trastornos musculoesqueléticos a largo plazo.

Esto no es una buena noticia para los millones de cajeros bancarios, asistentes de ventas al detalle, trabajadores de líneas de montaje y otros que se ganan la vida de pie. Los autores del estudio señalaron que casi la mitad de todos los trabajadores de todo el mundo pasan más de tres cuartas partes de su día laboral de pie.

Estar de pie durante dos horas en el trabajo no se asocia con problemas, pero "es probable que unos periodos más largos conlleven efectos nocivos", dijo la autora líder del estudio, María-Gabriela García, candidata doctoral del departamento de ciencias y tecnologías de la salud de ETH Zurich, en Suiza.

Los hallazgos aparecen en una edición reciente en línea de la revista Human Factors.

Estar de pie durante periodos largos ya se asocia con un mayor riesgo de problemas a corto plazo, como calambres en las piernas y dolor de espalda. Pero el estudio actual buscaba ver si estar de pie mucho tiempo también aumentaba el riesgo de contraer problemas a largo plazo.

Los investigadores se concentraron en 14 hombres y 12 mujeres. La mitad tenían de 18 a 30 años, y la mitad de 50 a 65. Ninguno presentaba antecedentes de ningún trastorno neurológico o musculoesquelético, y a todos se les pidió que evitaran la extenuación de alto nivel el día antes de participar en el estudio.

A todos se les pidió que, para replicar un turno en una planta de fabricación, simularan tareas ligeras mientras estaban de pie frente a una mesa de trabajo durante cinco horas, con descansos de cinco minutos y un descanso de media hora para almorzar.

La estabilidad de la postura y el estrés de los músculos de las piernas (cuantificada como la "fuerza de temblor muscular") se monitorizaron todo el tiempo, y se pidió a los participantes que reportaran cualquier incomodidad.

El resultado: independientemente de la edad o el sexo, era igual de probable que los participantes experimentaran una fatiga significativa al final del día de trabajo. Además, se observaron señales claras de fatiga muscular durante más de media hora después del final del periodo de estar de pie, independientemente de que los participantes hubieran sentido o no el esfuerzo.

Debido a que el estudio fue pequeño y de duración muy limitada, no prueba que un trabajo que obligue a estar de pie durante periodos prolongados dañe la salud, anotaron los autores del estudio.

Pero, dijo García, se necesita más investigación para encontrar formas de ayudar a los trabajadores con las dificultades de estar de pie a largo plazo.

Unos ejercicios de estiramiento regulares y "quizá incorporar descansos específicos, la rotación del trabajo o el uso de actividades más dinámicas, podrían aliviar los efectos de la fatiga a largo plazo", dijo García. Alternar el trabajo sentado y de pie también es beneficioso, dijo, "ya que alivia tanto los problemas de estar sentado mucho tiempo como los de estar de pie mucho tiempo".

Otro experto se mostró de acuerdo con la necesidad de descansos y cambios de postura frecuentes.

"Básicamente, al cuerpo no le gusta tener la misma postura o llevar la misma carga de forma continua, así que el cambio siempre es bueno", señaló Kermit Davis, director del programa de postgrado en higiene ambiental y de la salud de la Universidad de Cincinnati. "[Es bueno] tener descansos rutinarios para activar el flujo sanguíneo", añadió.

"Una de las implementaciones más fáciles para afrontar el problema es hacer descansos de rutina más o menos cada 30 minutos, en que [los trabajadores] se pongan de pie [o] se muevan para entregar documentos, guardar documentos en los archivos, copiar algo o usar el baño", planteó Davis. Explicó que su propia investigación ha sugerido que los descansos regulares no socavan la productividad del trabajador.

Cuando sea relevante, dijo, también es importante que las mesas de trabajo tengan la altura y distancia de los trabajadores adecuadas.


FUENTES: Maria-Gabriela Garcia, Ph.D. candidate, Sensory-Motor Systems Lab, department of health sciences and technology, ETH Zurich, Zurich, Switzerland; Kermit Davis, Ph.D., graduate program director, environmental and occupational hygiene program, University of Cincinnati; June 2015, Human Factors