Un ensayo clínico, llevado a cabo por investigadores de Johns Hopkins Bloomberg School of Public Health's y de la Universidad de Vermont (EE UU), ha demostrado una eficacia del 100% de una vacuna experimental de dosis única contra el dengue, el virus transmitido por mosquitos más prevalente en el mundo, que infecta a casi 400 millones de personas en más de 120 países cada año.
Los autores creen que los métodos utilizados en esta investigación podrían servir también como base para desarrollar una vacuna contra el Zika, un virus transmitido por la picadura de Aedes aegypti, el mismo mosquito que produce el dengue.
La eficacia de esta vacuna, desarrollada por científicos de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos, ha sido probada con un grupo de voluntarios sanos.
Los hallazgos, publicados en el último número de Science Translational Medicine, podrían ser la pieza final del rompecabezas en el desarrollo de una vacuna efectiva contra el dengue.
Aunque la mayoría de las personas infectadas con el dengue sobreviven con pocos o ningún síntoma, unos dos millones desarrollan una fiebre hemorrágica que ocasiona más de 25.000 muertes anuales.
El dengue y el Zika son transmitidos por el mismo mosquito, por lo que los métodos podrían servir también como base para desarrollar una vacuna contra el Zika
Hay cuatro cepas muy diferentes de dengue y se sabe que las personas infectadas una vez con una de ellas son propensas a enfermar si se infectan por segunda vez con una cepa diferente. Por esta razón, una buena vacuna contra el dengue tiene que proteger contra los cuatro virus, dicen los autores del estudio.
Un total de 41 personas sanas que no habían estado previamente expuestas al dengue recibieron una sola dosis de la vacuna o un placebo. Seis meses más tarde fueron infectadas con una forma debilitada del virus del dengue de la cepa 2, que es la más difícil de prevenir.
Candidatos prometedores
Mientras que las 20 personas del grupo de placebo desarrollaron síntomas leves tales como erupción y bajo recuento de glóbulos blancos, las 21 vacunadas no tuvieron ninguno de estos síntomas y resultaron completamente protegidas de la infección, explica Anna P. Durbin, epidemióloga de investigadora de Johns Hopkins Bloomberg y una de las autoras.
Este tipo de estudios controlados de exposición humana –ya utilizados ampliamente en vacunas experimentales contra la malaria– sirven para descartar candidatas farmacológicas pobres e identificar aquellas con más potencial. “Nos dan una cierta garantía antes de lanzar ensayos costosos y a menudo arriesgados en zonas endémicas de dengue”, dice Durbin.
La investigadora cree además que este tipo de ensayo puede ser también útil en el estudio del Zika, “no solo para el desarrollo de una vacuna, sino para aprender más de este virus del que sabemos tan poco”.
Los resultados de la TV003 han sido tan buenos que el pasado 22 de febrero se iniciaron las pruebas de fase 3 a gran escala en Brasil. El objetivo de inscripción es de 17.000 adultos, adolescentes y niños. La fecha de finalización está estimada en 2018.
Referencia bibliográfica:
B.D. Kirkpatrick el al. "The live attenuated dengue vaccine TV003 elicits complete protection against dengue in a human challenge model”. Science Translational Medicine (16 de marzo, 2016)