Enfermedad cardiaca y muerte

Vinculan la menopausia temprana con riesgos más altos

Los hallazgos subrayan la necesidad de que ciertas mujeres hablen sobre la terapia hormonal con el médico

Fuente: MedlinePlus

Las mujeres que llegan temprano a la menopausia podrían tener un riesgo más alto de enfermedad cardiaca y muerte prematura, sugiere un nuevo análisis.

Para llegar a esa conclusión, unos investigadores holandeses revisaron 32 estudios con más de 300,000 mujeres. Los investigadores compararon a las mujeres que tenían menos de 45 años al inicio de la menopausia con las que tenían a partir de 45 años cuando comenzó.

En general, el riesgo cardiaco pareció ser un 50 por ciento más alto en las mujeres que tenían menos de 45 años al inicio de la menopausia.

La menopausia temprana también pareció aumentar el riesgo de muerte cardiovascular y muerte por todas las causas. Sin embargo, no mostró una asociación con el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV), señalaron los autores del estudio.

Pero el estudio solo descubrió una asociación, no una conexión causal, entre la menopausia temprana y el riesgo cardiaco y de muerte.

Los hallazgos del estudio aparecen en la edición en línea del 14 de septiembre de la revista JAMA Cardiology.

"Estos hallazgos sugieren que las mujeres con una menopausia de inicio temprano podrían ser un grupo al que dirigir estrategias proactivas de prevención cardiovascular", planteó el autor del estudio, el Dr. Taulant Muka, del Centro Médico de la Universidad de Erasmus en Róterdam, Países Bajos.

Para las mujeres con una menopausia temprana o prematura, eso quizá conlleve terapia hormonal, señalaron los investigadores.

El uso a largo plazo del estrógeno, una hormona femenina, se ha asociado con un riesgo de cáncer y de ACV. Muchos expertos creen que los riesgos superan a los beneficios.

Pero el consejo es distinto para las mujeres que llegan a la menopausia antes de los 45 años, explicó JoAnn Manson, codirectora del Centro Connors de Salud de la Mujer y Biología del Género del Hospital Brigham and Women's, en Boston.

Dado que esas mujeres tienen un riesgo más alto de enfermedad cardiaca y osteoporosis, a menos que haya un "motivo claro" para evitarlo, los expertos recomiendan el tratamiento con estrógeno al menos hasta la edad promedio de la menopausia natural, señaló Manson.

Típicamente, la menopausia comienza a los 51 años. Pero hasta una de cada 10 mujeres experimenta una menopausia natural a los 45, anotaron los autores del estudio.

Ciertos tratamientos para el cáncer o la extirpación quirúrgica de los ovarios de una mujer provocan una menopausia prematura.

En todo el mundo, una de cada tres mujeres muere de enfermedad cardiovascular. Y por motivos que no están del todo claros, ese riesgo se acelera en la menopausia.

¿Podría el declive dramático en los niveles de estrógeno tras la menopausia tener la culpa? Probablemente sea algo más complicado, según los coautores de un editorial publicado junto al estudio.

"No sabemos definitivamente si el sistema reproductivo influye en la salud cardiovascular o la enfermedad cardiovascular influye en los ovarios", comentó Teresa Woodruff, una de las autoras del editorial. Woodruff es vicepresidenta de investigación en obstetricia y ginecología de la Universidad de Northwestern, en Chicago.

Manson, su coautora, dijo que es probable que el vínculo sea bidireccional: la menopausia temprana aumenta el riesgo de enfermedad cardiaca y factores de riesgo como la presión arterial alta (hipertensión) y el colesterol alto pueden dañar el flujo sanguíneo a los ovarios y conducir a la menopausia temprana.

Muka, autor del estudio e investigador postdoctoral, ofrece una posible explicación para el aumento en el riesgo al que se enfrentan las mujeres con una menopausia temprana: la pérdida temprana de la función ovárica podría activar un sistema en el cuerpo que regula la presión arterial, los fluidos corporales y la inflamación, planteó.

"La activación inapropiada de ese sistema provoca hipertensión y puede dañar al corazón", dijo Muka.

También es posible que pueda haber factores de riesgo genéticos o ambientales compartidos que conduzcan a la menopausia temprana y que aumenten el riesgo de malos resultados de salud, añadieron los investigadores.

Muka y sus colaboradores eligieron para su análisis estudios observacionales que evaluaban la edad que tenían las mujeres al inicio de la menopausia, además del tiempo que había pasado desde el inicio de la menopausia.

Y solo cuatro estudios evaluaron el tiempo que había pasado desde el inicio de la menopausia en relación con los riesgos cardiovasculares, y los resultados fueron inconstantes.

Pero los hallazgos relacionados con la edad mostraron un vínculo claro, apuntaron los investigadores. Aunque las mujeres que tuvieron una menopausia temprana se enfrentaban a unos riesgos de enfermedad cardiaca y muerte prematura más altos, las mujeres que tenían de 50 a 54 años al inicio presentaban un riesgo más bajo de enfermedad cardiaca letal que las mujeres menores de 50 años.

Basándose en los hallazgos, "la edad de la menopausia podría ser un predictor de eventos cardiovasculares y mortalidad en el futuro en las mujeres postmenopáusicas", apuntó Muka.

Los hallazgos fueron publicados en la edición en línea del 14 de septiembre de la revista JAMA Cardiology.

El estudio fue patrocinado y financiado por Metagenics Inc., un fabricante de complementos nutricionales con sede en California.


FUENTES: Taulant Muka, M.D., Ph.D., Erasmus University Medical Center, Rotterdam, the Netherlands; JoAnn Manson, M.D., Dr.P.H., co-director, Connors Center for Women's Health and Gender Biology, Brigham and Women's Hospital, Boston; Teresa Woodruff, Ph.D., vice chair for research, obstetrics and gynecology, Northwestern University, Chicago; Sept. 14, 2016, JAMA Cardiology, online