La enfermedad cardiaca encabeza la lista de lo que probablemente acabará con su vida o con la de un ser querido, reportaron el jueves las autoridades sanitarias de EE. UU.
Los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC), una agencia federal, publicaron datos de las cinco principales causas de muerte en los estadounidenses menores de 80 años en 2014. Tras la enfermedad cardiaca, la causa más probable de muerte fue el cáncer. La lista la completaron el accidente cerebrovascular (ACV), las enfermedades respiratorias crónicas inferiores (como el asma, la bronquitis y el enfisema) y los accidentes, señaló el informe.
Casi dos tercios de las muertes en Estados Unidos fueron provocadas por esas cinco enfermedades o afecciones.
Y muchas de esas muertes eran prevenibles. Un 30 por ciento de las muertes por enfermedad cardiaca, un 15 por ciento de las muertes por cáncer, un 28 por ciento de las muertes por ACV, un 36 por ciento de las muertes por enfermedades respiratorias crónicas inferiores, y un 43 por ciento de las muertes por accidentes eran prevenibles, enfatizaron los investigadores de los CDC.
La buena noticia del informe es que entre 2010 y 2014 hubo declives en tres de esas cinco causas principales de muertes prevenibles.
Esos declives fueron: una reducción del 25 por ciento en las muertes por cáncer, auxiliada por una reducción del 12 por ciento en la tasa de muerte ajustada por la edad por cáncer de pulmón; una reducción del 11 por ciento en las muertes relacionadas con el ACV; y una reducción del 4 por ciento en las muertes prevenibles por enfermedad cardiaca.
Pero en el mismo periodo, las muertes prevenibles por lesiones no intencionadas aumentaron en un 23 por ciento (sobre todo debido a intoxicaciones con medicamentos o drogas y caídas), y las muertes prevenibles por enfermedades respiratorias crónicas inferiores aumentaron en un 1 por ciento.
"Menos estadounidenses están muriendo a una edad joven por causas de muerte prevenibles", dijo en un comunicado de prensa de los CDC el Dr. Tom Frieden, director de la agencia.
"Trágicamente, las muertes por sobredosis están en aumento debido a la epidemia de opiáceos, y sigue habiendo grandes diferencias entre los estados en todas las causas prevenibles de muerte, lo que indica que se pueden salvar muchas más vidas a través del uso de prevención y tratamientos disponibles hoy en día", planteó Frieden.
Los datos sobre las muertes prevenibles ayudan a las autoridades de salud estatales y federales a establecer metas, prioridades y estrategias de prevención, según los CDC.
La agencia sugirió que los proveedores de atención de la salud pueden ayudar a prevenir las muertes prematuras al ofrecer a los pacientes consejería sobre cómo dejar de fumar, cómo protegerse de la enfermedad cardiaca y el ACV, y cómo evitar las lesiones accidentales.
FUENTE: U.S. Centers for Disease Control and Prevention