Las personas con una enfermedad cardiaca leve son más propensas a decir que tienen una peor salud, ansiedad y una actitud negativa que las personas en la población general, sugiere un estudio reciente.
Esos problemas son más comunes entre las pacientes de sexo femenino que entre los pacientes varones, encontraron los investigadores.
En la enfermedad cardiaca lave, hay un bloqueo parcial del flujo sanguíneo al corazón. Las personas que sufren de la afección están en un riesgo más alto de ataque cardiaco, otros problemas graves de salud, y muerte por cualquier causa.
La percepción de la salud física y mental general, además de la personalidad, puede tener un impacto en los resultados de salud, sugirió la autora principal del estudio, Paula Mommersteeg.
El estudio aparece en la edición del 21 de febrero de la revista Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes.
"Nos interesaron mucho esas diferencias sexuales y de género. No pensamos que serían tan aparentes, afirmó Mommersteeg en un comunicado de prensa de la revista. Mommersteeg es profesora asistente de psicología médica y clínica en la Universidad de Tilburg, en los Países Bajos.
Mommersteeg añadió que, debido a esto, los médicos deben considerar factores como una actitud negativa como un factor de riesgo potencial de la enfermedad cardiaca.
El nuevo estudio incluyó a más de 500 personas con una enfermedad cardiaca leve. También hubo un grupo de control de más de 1,300 personas sin problemas cardiacos. Todos los voluntarios del estudio tenían entre 52 y 70 años. Los investigadores les pidieron que completaran cuestionarios sobre su salud física y mental.
Aunque el estudio no pudo probar una relación causal, la investigación encontró que las personas con problemas cardiacos reportaron unas tasas significativamente más altas de mala salud, ansiedad y emociones negativas en combinación con una inhibición social, en comparación con las personas del grupo de control.
Las pacientes de sexo femenino reportaron unas tasas más altas de problemas de salud y ansiedad que los pacientes de sexo masculino.
Los investigadores dijeron que varios factores podrían explicar las diferencias de género. Éstos incluyen normas sociales y culturales, la edad de diagnóstico, el nivel educativo, el estado civil, los antecedentes de empleo y el consumo de alcohol.
FUENTE: Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes