Antecedentes

La eficacia general de las intervenciones conductuales en niños con trastorno por déficit de atención / hiperactividad (TDAH), incluido el entrenamiento de los padres, se ha investigado exhaustivamente. Sin embargo, como el éxito del tratamiento varía según las familias, varios estudios investigaron el papel moderador del TDAH de los padres en la eficacia de la capacitación conductual de los padres. Esta introducción se basa en parte en dos revisiones exhaustivas que resumen los hallazgos de esta área de investigación.

La heredabilidad del TDAH es alta y muchos niños con TDAH tienen padres que muestran síntomas de TDAH. Además, los padres con TDAH tienen más probabilidades de tener deficiencias en la crianza de los hijos que los padres sin TDAH.

Lo más importante es que el TDAH de los padres se ha relacionado con la reducción de la eficacia del entrenamiento de los padres en el comportamiento. Se han notificado efectos reducidos para los síntomas del TDAH infantil y los problemas de comportamiento, así como para la crianza.

Sin embargo, también hay estudios que informan que el TDAH parental no tiene un efecto de deterioro en el beneficio del tratamiento para los niños, lo que puede explicarse, al menos en parte, por los padres menos afectados y los tratamientos más personalizados en los estudios respectivos.

El tratamiento del TDAH en adultos también puede afectar la crianza y el resultado del niño

Para los adultos con TDAH, la opción actual de tratamiento de primera línea es la farmacoterapia. El tamaño de los efectos de los estimulantes en los síntomas del TDAH está en el rango medio a grande y son comparables a los informados para niños y adolescentes. La terapia cognitiva conductual ha sido investigada con menos intensidad pero la evidencia disponible muestra algunos hallazgos positivos.

El tratamiento del TDAH en adultos (farmacoterapia, terapia cognitivo-conductual) también puede afectar la crianza y el resultado del niño. Solo un pequeño número de ensayos ha investigado este tema con respecto a la farmacoterapia.

La evidencia actual es mixta y se ha sugerido que los efectos de la farmacoterapia en la crianza de los hijos podrían ser limitados e insuficientes. Por lo que sabemos, los efectos de las intervenciones cognitivo-conductuales en adultos aún no se han evaluado con respecto a los resultados del niño.

Algunos estudios probaron el efecto combinado del tratamiento de los padres con TDAH y el entrenamiento conductual de los padres en términos de mejorar el resultado del niño. En tales casos, el tratamiento para adultos puede tener dos propósitos diferentes: primero, puede tener un efecto más o menos directo (limitado) en la crianza y en el resultado del niño (a través de la crianza); y segundo, las mejoras en el funcionamiento neurocognitivo pueden ayudar a los padres a participar y beneficiarse de la capacitación (por ejemplo, mantener la atención durante las sesiones) y cumplir con los requisitos correspondientes (por ejemplo, la tarea).

En un estudio de Babinski et al., la combinación de farmacoterapia para adultos y entrenamiento conductual de padres no reveló ninguna ventaja de tratamiento sobre el entrenamiento conductual de padres solo con respecto a la crianza observada y el comportamiento infantil.

Sin embargo, los padres solo recibieron estimulantes antes y después del período de intervención de capacitación de los padres. Por lo tanto, el estudio pudo proporcionar información sobre los efectos a corto plazo de los estimulantes en la crianza de los hijos, pero no sobre la ventaja potencial del tratamiento de la medicación para la participación en el entrenamiento.

Resumen

Las intervenciones para ayudar a los niños con trastorno por déficit de atención / hiperactividad (TDAH) suelen involucrar a las madres, pero el TDAH en las madres podría afectar la forma en que participan en el tratamiento.

Para examinar los efectos de abordar por primera vez los síntomas del TDAH de las madres en los resultados de la capacitación del TDAH entre padres e hijos, los investigadores en Alemania realizaron un ensayo controlado, multicéntrico, de múltiples fases y aleatorizado en 143 madres (edad media, 38) con TDAH con DSM-IV (la mayoría de ellas combinadas tipo; 71% con trastornos psiquiátricos comórbidos, trastornos depresivos predominantemente) y sus hijos con TDAH (edad media, 9 años; niños, 73%; tipo combinado, 52%; trastorno de oposición desafiante, 30%).

Las madres no estaban recibiendo terapia actual o tratamiento farmacológico; Antes y durante el ensayo, el 75% de los niños recibió medicación estable en curso.

En la fase I, las madres tratadas recibieron 12 semanas de sesiones grupales de 2 horas (con psicoeducación basada en terapias de comportamiento cognitivo-conductuales y dialécticas, atención plena, habilidades de organización), hasta tres sesiones individuales, más metilfenidato de acción prolongada; las madres de control recibieron asesoramiento de apoyo no directivo de 15 a 20 minutos.

En la fase II, todas las madres recibieron 12 sesiones de capacitación semanales idénticas (más ≤2 refuerzos) en una terapia basada en el manual (reglas de crianza de los hijos, órdenes efectivas, consecuencias, tiempos de espera, etc.).

Aunque la mayoría de los tamaños del efecto fueron modestos, las madres del grupo de tratamiento mostraron una mayor reducción de los síntomas en la fase I que en la fase II.

En la fase I, solo mejoraron las evaluaciones de los comportamientos perturbadores de las madres del grupo de tratamiento. En la fase II, las calificaciones de los médicos sobre el comportamiento perturbador de los niños disminuyeron en ambos grupos (con un tamaño de efecto medio).
Comentario

Aunque el tratamiento para el TDAH benefició los síntomas de las madres y redujo las conductas disruptivas de los niños, la capacitación de padres e hijos (en la fase II) ayudó a reducir los síntomas perturbadores en los niños, incluso cuando las madres no fueron tratadas de antemano.

El estudio subraya el valor de evaluar a los padres para el TDAH y ofrecerles tratamiento junto con sus hijos.