Por el alza de los brotes

OMS alerta que la gripe aviar podría infectar más fácil a humanos

El aumento de casos entre mamíferos puede facilitar que el virus mute, alertaron científicos. Las subas afectaron a Europa y América, con millones de especies sacrificadas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió sobre un aumento en los brotes de gripe aviar entre los mamíferos que podría alentar la propagación del virus entre los humanos.

Un comunicado de la OMS sostuvo que "algunos mamíferos pueden hacer que el virus de la gripe mute, dando lugar a la aparición de nuevos virus que podrían ser más dañinos para los animales y los humanos".

Según la agencia sanitaria de Naciones Unidas, los brotes actuales de gripe aviar causaron "devastación" en los animales, como las aves de corral y silvestres, junto con algunos mamíferos, y afectó de forma negativa los medios de vida de los agricultores y el comercio de alimentos.  "Aunque afectan en gran medida a los animales, estos brotes plantean riesgos continuos para los humanos", dijo la organización en un documento citado por la agencia ANSA.

La OMS, junto con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (WOAH), instó a los países a trabajar juntos para proteger a las personas y los animales. "La epidemiología de la gripe aviar ha aumentado la preocupación mundial a medida que la enfermedad se ha extendido a nuevas regiones geográficas y ha causado mortandades inusuales de aves silvestres y un aumento alarmante en los casos de mamíferos", dijo el científico jefe de WOAH Gregorio Torres.

Desde fines de 2021, Europa se vio afectada por el peor brote de gripe aviar, mientras que América del Norte y del Sur también experimentaron brotes graves. Esto llevó al sacrificio de decenas de millones de aves de corral (biológicamente más cercanas a los humanos que a las aves) en todo el mundo, muchas de ellas con la cepa H5N1 del virus, que surgió por primera vez en 1996.

Los casos de gripe aviar en seres humanos suelen ser el resultado de la exposición directa o indirecta a aves de corral infectadas, vivas o muertas, o a entornos contaminados, concluyó ANSA.