Según una revisión sistemática que acaba de publicar la Colaboración Cochrane, en la que han participado investigadores españoles, no hay evidencia de que sea beneficiosa la práctica habitual de administrar oxígeno a los pacientes con infarto de miocardio. Los autores señalan que hasta que no se lleven a cabo más investigaciones no se puede descartar la posibilidad de que esta práctica pueda incrementar el riesgo de muerte de estos pacientes.
A nivel mundial, más de 30 millones de personas sufren infarto de miocardio cada año, según datos de la Organización Mundial de la Salud. Los infartos de miocardio se deben a que se interrumpe el flujo de sangre oxigenada al corazón. A menudo, a los pacientes con infarto de miocardio se les administra oxígeno para tratar de mejorar la oxigenación del tejido cardiaco. Sin embargo, hay pocas evidencias de que esta intervención mejore la evolución de dichos pacientes e incluso alguna sugiere que puede incluso causar daños.
Los investigadores incluyeron en el estudio datos de tres ensayos clínicos aleatorios. En estos estudios los pacientes recibieron oxígeno puro o aire para inhalar durante las 24 horas siguientes a la aparición de los síntomas del infarto de miocardio. De los 387 pacientes incluidos en los estudios murieron 14, pero de éstos, casi tres veces más habían inhalado oxígeno en lugar de aire.
Aunque los resultados parecen sugerir que dar oxígeno podría causar más daños que beneficios, los investigadores señalan que aún no hay suficientes datos para estar seguros. El primer autor del a revisión, el Dr Juan Cabello, del Hospital General Universitario de Alicante, afirma: "Es realmente asombroso cómo los cardiólogos hemos estado utilizando este tratamiento sin una evidencia sólida".
"Este resultado no significa necesariamente que la administración de oxígeno aumente el riesgo de muerte por un infarto de miocardio ", dijo la Dra. Amanda Burls del Departamento de Atención Primaria de Salud en la Universidad de Oxford, Reino Unido. "Las cifras son tan pequeñas que podrían haberse debido únicamente al azar."
Sin embargo, comenta el profesor Tom Quinn, otro de los investigadores de la Facultad de Salud y Ciencias Médicas de la Universidad de Surrey en Guildford, Reino Unido, es importante continuar investigando. "Debido a que este es un tratamiento ampliamente utilizado, creemos que es importante que se lleve a cabo un gran ensayo tan pronto como sea posible para asegurarse de que la administración de oxigeno no causa ningún daño”.
Referencia:
Cabello JB, Burls A, Emparanza JI, Bayliss S, Quinn T. Oxigenoterapia para el infarto agudo de miocardio (Revision Cochrane traducida). En: Biblioteca Cochrane Plus 2010 Número 1. Oxford: Update Software Ltd. Disponible en: http://www.update-software.com. (Traducida de The Cochrane Library, 2010 Issue 6 Art no. CD007160. Chichester, UK: John Wiley & Sons, Ltd.).
Podcast http://www.cochrane.es/files/podcast/oxigeno_spanish.mp3