| La cardiopatía materna se ha convertido en una importante amenaza para la maternidad segura y la salud cardiovascular a largo plazo de las mujeres. En los Estados Unidos, las enfermedades y disfunciones del corazón y del sistema vascular como “enfermedad cardiovascular” son ahora la principal causa de muerte en mujeres embarazadas y en el período posparto, lo que representa 4,23 muertes por cada 100.000 nacidos vivos, una tasa que casi duplica al Reino Unido. |
| 1. La enfermedad cardíaca es la causa número uno de mortalidad materna en los Estados Unidos y está aumentando. |
La enfermedad cardíaca es responsable de más de una cuarta parte de todas las muertes relacionadas con el embarazo y es la causa número uno de mortalidad materna en los EE. UU. Hay dos razones principales para esto.
En primer lugar, las pacientes quedan embarazadas más tarde en la vida, cuando han tenido más tiempo para adquirir enfermedades cardíacas o factores de riesgo cardiovasculares. En segundo lugar, los cardiólogos hacen un gran trabajo atendiendo a niños con enfermedades cardíacas congénitas. Esto significa que las pacientes con cardiopatías congénitas viven hasta la edad adulta y están lo suficientemente sanas como para considerar quedar embarazadas.
Los cambios que debe sufrir el sistema cardiovascular para sostener un embarazo saludable pueden considerarse una prueba de esfuerzo de 9 meses para el corazón. Es posible que los pacientes con enfermedades cardiovasculares no puedan tolerar esto, lo que los pone en riesgo de sufrir complicaciones relacionadas con su corazón durante o después de la gestación
| 2. La mayoría de las personas con enfermedades cardíacas pueden llevar un embarazo de forma segura si reciben la atención y el seguimiento adecuados durante el embarazo y el parto. |
Muchos resultados adversos se pueden prevenir si los pacientes reciben la atención adecuada. Por lo general, la mayoría de las pacientes pueden tener un embarazo seguro y exitoso. Sin embargo, todas las pacientes que estén considerando quedarse embarazadas deben comprender los riesgos potenciales relacionados con su enfermedad cardiovascular. Antes, durante y después del embarazo, las pacientes con enfermedades cardíacas deben recibir atención minuciosa de un especialista que pueda evaluar su riesgo y controlar de cerca la salud cardiovascular.
| 3. Para las personas con enfermedades cardíacas, el embarazo debe planificarse cuidadosamente. |
Aunque normalmente es seguro para personas con enfermedades cardíacas, el embarazo debe planificarse con mucho cuidado.
Es importante realizar una evaluación integral de riesgos, obtener estudios de diagnóstico e imágenes actualizados y asegurarse de que las pacientes tomen medicamentos seguros para el embarazo antes de concebir.
Por eso es especialmente importante que las personas con enfermedades cardíacas en edad fértil utilicen un método anticonceptivo confiable.
La mejor forma de anticoncepción puede ser diferente para cada paciente individual. Hay consideraciones sobre el estilo de vida, pero también consideraciones específicas de las enfermedades cardíacas. Por ejemplo, el estrógeno sistémico es uno de los medicamentos anticonceptivos orales más recetados, pero no es seguro para muchas pacientes con enfermedades cardíacas.
Todas las pacientes con enfermedades cardíacas (o incluso con factores de riesgo de enfermedades cardíacas) deberían tener una consulta formal para determinar qué forma de anticoncepción será mejor para ellas.
| 4. Algunas afecciones que surgen durante el embarazo, como la preeclampsia, se asocian con un mayor riesgo de futuras enfermedades cardiovasculares. |
Los resultados adversos que surgen durante el embarazo pueden ser una ventana útil a la salud cardiovascular general de una paciente.
Puede ser aterrador y perturbador para las pacientes experimentar preeclampsia en el momento del parto, afirman los especialistas. Para las pacientes que experimentan preeclampsia, puede ser útil consultar a un especialista para determinar si tienen otros factores de riesgo de enfermedad cardíaca.
Cuando se examinan a pacientes que han tenido preeclampsia sin otros factores de riesgo identificados de enfermedad cardíaca, a menudo se observa que su colesterol o lipoproteína(a) está elevado, o que tienen prediabetes.
| 5. La mayoría de las personas con enfermedades cardíacas pueden amamantar o amamantar de manera segura si así lo desean. |
La mayoría de las pacientes con enfermedades cardíacas deberían poder amamantar si así lo desean.
Pero hay desafíos. Los pacientes con enfermedades cardíacas pueden necesitar consultas para determinar si sus medicamentos cardíacos son seguros para su bebé durante la lactancia. Otros medicamentos pueden afectar negativamente el suministro de leche materna, provocando problemas desde el principio. Las pacientes con enfermedades cardíacas a menudo tienen partos más complicados o necesitan procedimientos o cirugías después del parto que pueden dificultar logísticamente la lactancia.
La lactancia materna se asocia con tasas más bajas de enfermedades cardíacas adquiridas y comorbilidades cardiovasculares en etapas posteriores de la vida. Cualquier medida que se pueda tomar para mejorar la salud cardiovascular de las pacientes es importante. El objetivo es tener un embarazo seguro y saludable y prepararlas para una mejor salud cardiovascular a largo plazo.