Los datos de cinco ensayos clínicos con 5.000 pacientes, presentados en la XVII reunión de la Sociedad Europea de Hipertensión (SEH), celebrada en Milán, ponen de relieve el potencial clínico del antihipertensivo aliskiren.
Se trata del primer antihipertensivo de una nueva clase terapéutica en más de una década, ya que, a diferencia de otros fármacos, aliskiren actúa inhibiendo directamente la renina, enzima que desencadena un proceso que puede conducir a la hipertensión arterial.
En concreto, este medicamento tiene una duración de acción prolongada y proporciona a los pacientes un efecto antihipertensivo significativo durante más de 24 horas, aunque se use en monoterapia. Además, no sólo regula la presión arterial a lo largo de las 24 horas del día, sino que este efecto antihipertensivo puede también persistir casi dos semanas tras la suspensión de tratamiento.
Asimismo, cuando aliskiren se combinó con otros antihipertensivos proporcionó a lo largo de todo el programa clínico una disminución adicional significativa de la presión arterial y una buena tolerabilidad. Los datos presentados también indican que aliskiren actúa incluso en poblaciones de pacientes de difícil tratamiento.
En marzo de 2007, aliskiren fue aprobado por la FDA.