Pacientes con glaucoma

Relación entre la reducción de la presión sanguínea nocturna y la progresión del defecto de campo visual

El presente es un estudio prospectivo a largo plazo de la relación entre la dip y el daño glaucomatoso del nervio óptico.

Autor/a: Dres. Tokunaga T, Kashiwagi K, Tsumura T, Taguchi K, Tsukahara S.

Fuente: Jpn J Ophthalmol. 2004 Jul-Aug;48(4):380-5.

Indice
1. Desarrollo
2. Bibliografía

La reducción de la presión sanguínea durante la noche se conoce como dip nocturna (dip). Se han realizado numerosos estudios en distintos campos de la medicina, no sólo en oftalmología, para determinar la relación entre la magnitud de la dip y la patogénesis o exacerbación de ciertas enfermedades. También existen estudios sobre la relación entre la dip y el glaucoma pero la interpretación de los datos difiere. Dichos estudios han indicado que las alteraciones circulatorias del nervio óptico contribuyen al daño glaucomatoso del dicho nervio. Estos resultados  señalan que las alteraciones circulatorias nocturnas en la región del nervio óptico pueden exacerbar el daño del nervio óptico causado por el glaucoma. El presente es un estudio prospectivo a largo plazo de la relación entre la dip y el daño glaucomatoso del nervio óptico, tomando como punto referencia final la pérdida del campo visual.

Pacientes y métodos:

Se estudiaron 38 pacientes con glaucoma (23 pacientes con GTN y 15 con GPAA), a quienes se les realizó un control ambulatorio de la presión sanguínea de 48 hs., con un seguimiento posterior de cuatro años, durante los cuales se realizaron pruebas de campo visual por lo menos 5 veces. La progresión se determinó por el análisis de la curva de desviación media (DM) según el analizador de campo Humphrey. Los pacientes con glaucoma con una dip de <10 % fueron clasificados dentro del grupo sin dip, aquellos con una dip de 10 a 20% en el grupo dip y los que presentaron una dip > 20% en el grupo dip extrema. El grupo dip se difinió la dip como dip fisiológica y en los otros dos grupos como dip no fisiológica,  para estudiar la relación entre la alteración de la dip y la progresión del defecto del campo visual.

En el gráfico se muestra a una paciente representativa con progresión. La fluctuación de la desviación media (DM) de una mujer de 59 años con glaucoma de tensión normal. La dip es 11,4% y el análisis de la curva de desviación media revela una progresión significativa con un valor P menor al 1%. Curva DM=0,43±0,29 dB/año (95% intervalo de confianza).


Los resultados del presente estudio muestran una tendencia a una mayor progresión del defecto del campo visual en los pacientes con dip no fisiológicas que en los pacientes con dip fisiológica. Los pacientes con progresión tuvieron dips significativamente menores a los pacientes sin progresión. Dado que no hubo diferencias significativas del control de la PIO entre los grupos, estos datos indican que la dip que no está dentro de los parámetros fisiológicos puede asociarse con una progresión del glaucoma.

Informes anteriores señalaron que los pacientes sin dip tienen una mayor incidencia de enfermedades cardiovasculares, mientras que los que presentan dip extrema muestran una mayor progresión de enfemedades cerebrovasculares asintomáticas.

En el presente estudio se determinó la progresión del defecto de campo visual utilizando la curva de DM en pacientes sin cambios en su condición sistémica o en la utilización de medicación sistémica durante el período de seguimiento. Como el seguimiento fue prolongado consideramos que los resultados son confiables.

Dado que la reducción de la presión sanguínea nocturna varía de acuerdo con la profundidad del sueño, solicitamos a los pacientes llevar un registro diario  para confirmar la profundidad del sueño durante las mediciones. Ningún paciente denunció alteraciones del sueño durante las mediciones.

Las variaciones diurnas de la PS son controladas por el sistema nervioso autónomo, al igual que la PIO. Se ha examinado el ritmo cardíaco de los pacientes con GTN como índice de la función autónoma y se ha observado que el sistema nervioso autónomo de pacientes con  GTN difiere del de los controles normales y que existe una marcada tendencia entre estos pacientes a presentar progresión del daño glaucomatoso del nervio óptico. Esto podría estar relacionado con la progresión observada en los grupos con dip no fisiológica. Deben realizarse mayores estudios para estudiar esta relación.

Dado que la cantidad de pacientes estudiados es reducida, es necesario obtener datos más confiables aumentando la cantidad de pacientes. Además debería realizarse más de un monitoreo ambulatorio de la presión sanguínea durante el período del estudio.