Ventajas de la Mielografía
a) Es panorámica. Abarca hasta cinco o más niveles vertebrales (proyecciones antero - posterior, lateral y oblicuas).
b) Es dinámica. Es la única prueba que se efectúa flexionando y extendiendo el segmento estudiado (cervical, dorsal o lumbar).También se puede reproducir el cuadro doloroso y demostrar en ese momento el problema de tipo compresivo o inestable de la columna.(9)
c) Es demostrativa. Se puede observar el dato de una compresión ya sea intrarraquídea, extrarraquídea, traumática o tumoral.
d) Es accesible. Casi en cualquier estudio de radiología es posible realizarla, sólo se requiere de un médico preparado para llevar a cabo el procedimiento y un aparato de radiologíacon fluoroscopía.
e) Es económica. El costo promedio del estudio es de $2000 a $3000.
La mayor ventaja de la mielografía respecto a métodos más recientes como la tomografía axial computarizada (TAC )(10) o la resonancia magnética (RM), es el factor dinámico.(11) Tanto la TAC como la RM se practican con el paciente en decúbito dorsal (acostados) y se le indica a éste no moverse, en tanto que la mielografía se realiza en cualquier posición, de preferencia sentado, a fin de demostrar la patología. Para producir el efecto de dolor en el sitio afectado, se le pide al paciente que haga movimientos de flexión y extensión de la columna lumbar al momento de efectuarse la mielografía,(12) con lo cual se comprueba la zona lesionada en una visión panorámica en anteroposterior, lateral u oblicua. Así mismo, existe la posibilidad de ver segmentos vertebrales hasta de cinco cuerpos vertebrales; con el movimiento de flexión y extensión se puede observar el comportamiento de cada cuerpo vertebral y el disco arriba y debajo de dicho cuerpo. Algunas veces se detecta hasta la presencia de compresión por hernias discales, osteofitos, masas tumorales o fracturas vertebrales.
Por su parte, los otros dos estudios –TAC y RM– señalan sitios muy específicos de un solo segmento vertebral en las proyecciones axiales y carecen de la presencia de movilidad para demostrar patología.
En la parte económica, la conveniencia de la mielografía es que cuesta una tercera o cuarta parte de la RM o la TAC. La disponibilidad de efectuar una mielografía es mayor, de diez a uno, en cualquier ciudad de nuestro país dada la saturación de trabajo de la TAC y RM en los grandes hospitales que cuentan con los respectivos aparatos para realizar esos estudios.
Un comentario que podríamos agregar es que si se tiene la ventaja de acceder a un estudio de TAC, sería más concluyente un estudio de mielografía y tomografía al mismo tiempo, siendo la primera dinámica y la segunda para demostrar la especificidad de la o las lesiones presentadas previamente.
Complicaciones
Las complicaciones más frecuentes que presentan los pacientes a quienes se ha practicado la mielografía es la cefalea, debido a la presencia de salida de líquido cefalorraquídeo en el sitio de la punción (comúnmente en la región lumbar).
Como norma general, se le indica al paciente mantener reposo en cama en posición semifowler durante tres días y estar de pie para ir al baño, sentarse para comer e ingerir abundantes líquidos dulces vía oral, para que a través de la absorción intensa de éstos se produzca más cantidad de líquido cefalorraquídeo en los plexos coroides de los ventrículos laterales y sean enviados al tercer ventrículo y al cuarto a través del conducto de Silvio, y pasen a la médula por el canal del epéndimo bañando las raíces. De esta forma se repone el líquido cefalorraquídeo perdido por la punción dural durante la introducción del medio de contraste.
Cuando el paciente no sigue las indicaciones de estar en reposo, y además ha hecho esfuerzos, el líquido cefalorraquídeo drena a través del agujero de punción.
Al haber carencia de dicho líquido, se origina una cefalea intensa que cede cuando el paciente guarda reposo y toma analgésicos y abundantes líquidos dulces para aumentar la producción del líquido cefalorraquídeo.
Otra complicación muy lejana es la alergia al medio de contraste (yodo), la cual, en mi experiencia en un hospital de concentración donde se efectúan estudios de mielografía en un promedio de 10 diarios, se ha presentado sólo en dos ocasiones en 23 años.