La obesidad androide (OA), más frecuente en varones, se asocia con mayor riesgo de ateroesclerosis, DBT 2, ictus ("stroke"), enfermedad cardiovascular y aumento de la mortalidad atribuible a obesidad. Los factores modificables asociados a OA son el control del peso, la actividad física (AF) y el tabaquismo (T). Es controvertido el efecto de la dieta, composición de macronutrientes, alcohol (A) y fibra dietaria. El perímetro de cintura (PC) es un indicador de la masa grasa subcutánea y visceral.
Objetivo:
Determinar la asociación entre cambios en el estilo de vida (dieta, AF, A y T) y aumento del PC en varones, durante 9 años de seguimiento.
Métodos:
Se estudió una cohorte de 16.587 hombres sanos durante todo el estudio, de 40 a 75 años al inicio. Se tomaron datos del Estilo de Vida (EV) mediante cuestionarios. Se valoró el PC al inicio y 9 años más tarde.
Resultados:
Muchas variables se relacionaron con cambios en el PC, atribuibles a dichos factores:
Con igual número de calorías, el aumento del 2% en el consumo de grasas trans, en reemplazo de grasas poliinsaturadas o carbohidratos en forma isocalórica, se asoció con un aumento mayor del PC en 0,77 cm en 9 años. Aumentar las fibras en 12 g diarios se asoció con un PC 0,63 cm menor. Dejar de fumar aumentó el PC 1,98 cm. Mirar 20 hs semanales más de TV, significó un aumento de 0,59 cm.
Al aumentar la AF, disminuyó el PC. El aumento de AF vigorosa, estimada en 25 METs/hora/semana, (equivalentes metabólicos, unidad de medida de intensidad de la AF), disminuyó el PC en 0,38 cm. El mayor entrenamiento con suplementos de pesas (aumentar 0,5 horas semanales o más), redujo el PC en 0,91 cm,
Estas variables siguieron siendo válidas, aún después de incluir en el análisis de los resultados, los cambios en el peso corporal y el IMC.
No se encontró relación significativa entre el PC y cambios en el consumo total de grasas, A y horas de caminata.
Discusión:
En esta cohorte el aumento del PC, en los 9 años de seguimiento, no pudo explicarse por un incremento en la obesidad.
· Grasas: Muchos estudios no pudieron relacionar ingesta de grasa con OA. El consumo de grasas en un rango de 18 a 40%, tiene poco efecto sobre la adiposidad corporal. Sin embargo, los distintos ácidos grasos, afectan en forma diferente la adiposidad abdominal, probablemente a través de sus efectos sobre la insulina. Las grasas poliinsaturadas mejoran la sensibilidad insulínica y la distribución abdominal del tejido adiposo. Las saturadas y las trans la empeoran. Es probable que las trans, alteren la sensibilidad insulínica a través de modificaciones en la membrana celular y del aumento de las IL6, factores de necrosis tumoral y prostaglandinas. El hiperinsulinismo resultante puede promover la acumulación de grasa, a través de la expresión de la lipoprotein-lipasa. Así los efectos de la insulina pueden expresarse mejor en los adipositos viscerales, en comparación con los subcutáneos, debido a su mayor celularidad, inervación e irrigación.
· Fibras: Las fibras bajan el índice glucémico y la respuesta insulínica. Afectan la regulación del apetito y la saciedad y disminuyen la ingesta.
· Tabaco: Los fumadores que dejaron el T, aumentaron el PC más que lo esperable por el aumento de peso.
· Sedentarismo: Sólo medido por horas de TV, en este estudio, aumentó el PC
· AF: La AF vigorosa fue la única que mostró beneficios sobre la OA. Para obtener los beneficios metabólicos de la AF, es necesaria cierta intensidad de ejercicio.
Conclusiones:
El aumento del PC, como variable independiente del peso corporal, puede modularse a través de cambios en el consumo de grasas trans, fibras y AF.
Los mayores beneficios observados en este estudio se obtuvieron al disminuír las grasas trans y además aumentar la ingesta de fibras (el PC bajó 2,9 cm en 9 años).
En otro estudio estos autores demostraron que si el PC bajaba 2,5 cm, el riesgo de DBT 2 era 20% menor.
Alteraciones simples en la dieta, y más AF podrían ayudar a controlar la epidemia creciente de obesidad y sus consecuencias.
Artículo comentado por la Dra. Débora Setton, editora responsable de IntraMed en la especialidad de Nutrición.