Objetivo
Los autores evaluaron la utilidad de la ecografía para detectar la presencia de cirrosis en pacientes con hepatopatía crónica asintomática no estadificada.
Material y método
Se evaluaron en forma prospectiva la ecografía doppler y las características ecográficas, inmediatamente antes de realizar la laparoscopia y la biopsia del hígado, juntas o por separado. La utilidad de las variables predictivas seleccionadas se realizó utilizando el análisis de regresión múltiple, habiéndose incluido una escala de puntaje que fue determinada por curvas ROC.
Los autores incluyeron 113 pacientes consecutivos sin signos clínicos ni bioquímicos de enfermedad hepática avanzada que había sido derivados para el estudio
Resultados
Se comprobó la existencia de hepatomegalia, nodularidad de la superficie hepática, distorsión del parénquima hepático, aplanamiento de las ondas de flujo de las venas hepáticas, dilatación de las venas porta y esplénica y disminución de la variabilidad del calibre de la vena esplénica con la respiración.
Los vasos colaterales y la esplenomegalia se asociaron con cirrosis. El análisis multivariado demostró que la evaluación conjunta de la ecoestructura hepática, el calibre de la vena porta y el área esplénica es la mejor aproximación a la estadificación ecográfica, con una sensibilidad del 80%, una especificidad del 92% y una exactitud del 89% en el diagnóstico de cirrosis.
Conclusiones
De acuerdo con los resultados obtenidos, los autores afirman que la ecografía permitió demostrar que la presencia o la ausencia de cirrosis puede ser determinada correctamente por la ecografía en los pacientes con enfermedad asintomática.
"La evaluación combinada de la ecoestructura hepática, el diámetro de la vena porta y el tamaño del bazo brindan la mayor precisión diagnóstica."
Traducción y resumen objetivo. Dra. Marta Papponetti. Editora responsable de Medicina Interna de Intramed. Especialista en Medicina Interna. Docente Autorizada de la Universidad de Buenos Aires.