Los beta-2 agonistas, como el salbutamol, son utilizados no sólo por atletas asmáticos para prevenir el asma inducido por el entrenamiento físico, sino también por atletas no asmáticos como un agente potencialmente ergogénico.
En base a estos antecedentes, un grupo de investigadores intentaron determinar si el salbutamol inhalado aumenta la resistencia física en los atletas no asmáticos.
A partir de un estudio prospectivo de doble ciego, randomizado y de tres vías, los investigadores estudiaron los efectos de 200 µg y de 800 µg de salbutemol inhalado frente a un placebo en 12 atletas entrenados. Los tratamientos fueron comparados en tres sesiones ergométricas de ciclos idénticos al 85% del consumo máximo de oxígeno predeterminado. Los investigadores evaluaron la función pulmonar, el tiempo de resitencia, los parámetros metabólicos (glucosa, potasio, lactato, ácidos libres de grasas y glicerol) y el rendimiento psicomotor.
De acuerdo a los resultados obtenidos, ni el tiempo de resistencia ni la broncodilatación luego del entrenamiento fueron significativamente diferentes entre los tratamientos. Los parámetros metabólicos estuvieron afectados por el entrenamiento pero no por el tratamiento.
El salbutamol inhalado, incluso a dosis altas, no presenta efectos significativos sobre la resistencia en atletas no asmáticos, a pesar de que los efectos de broncodilatación de la droga durante el inicio del ejercicio pueden mejorar la adaptación respiratoria. Los investigadores consideran que estos resultados no involucran el efecto ergogénico que pueden provocar los agonistas 2 administrados por otras vías o durante períodos mayores de tiempo.