Una terapia farmacológica combinada que busca abrir las vías respiratorias y reducir la inflamación parece ser el mejor tratamiento para los adultos mayores con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), sobre todo los que sufren de asma, halla un estudio reciente.
Los pacientes de EPOC que recibieron una combinación de agonistas beta de acción prolongada y corticosteroides inhalados tenían menos probabilidades de morir o de requerir una hospitalización debido a su trastorno respiratorio, en comparación con las personas que recibieron solo uno de los dos fármacos, informan unos investigadores canadienses.
Los hallazgos del estudio aparecen en la edición del 17 de septiembre de la revista Journal of the American Medical Association.
Los hallazgos contradicen a las directrices oficiales para el tratamiento de la EPOC, pero en realidad respaldan lo que la mayoría de médicos hacen en la clínica, señaló la autora líder, la Dra. Andrea Gershon, científica del Centro de Ciencias de la Salud Sunnybrook y del Instituto de Ciencias de la Evaluación Clínica, en Toronto.
Las directrices actuales indican que los pacientes de EPOC deben primero recibir un agonista beta de acción prolongada, que relaja los músculos de las vías respiratorias y las ensancha, lo que resulta en una respiración más fácil. Si eso no funciona, los médicos pueden entonces añadir un corticosteroide inhalado, que reduce la inflamación.
"Hallamos que la combinación pareció ser más efectiva, y hallamos que muchas personas inician esta terapia combinada de inmediato", apuntó Gershon. "Quizá los médicos han intuido estos beneficios, o quizá las compañías farmacéuticas hicieron un mercadeo muy bueno".
Además, los investigadores hallaron que la terapia combinada no complicó los riesgos de una persona de efectos secundarios de ninguno de los dos fármacos, siendo los más notables la osteoporosis y la neumonía.
"Sospecho que cuando los médicos lean esto, se ahorrarán ese primer paso y pasarán directamente a la terapia farmacológica combinada", apuntó el Dr. Norman Edelman, asesor médico principal de la Asociación Americana de los Pulmones (American Lung Association).
La EPOC es la tercera causa principal de muerte en todo el mundo, apuntaron los investigadores en la información de respaldo. La enfermedad hace que para los pacientes sea progresivamente más difícil respirar, y los síntomas empeoran lentamente con el tiempo.
El estudio usó datos sanitarios gubernamentales de Ontario sobre casi 12,000 personas con EPOC entre 2003 y 2011, entre ellos 8,712 pacientes recién iniciados en la terapia combinada y 3,160 nuevos usuarios de agonistas beta de acción prolongada.
Los expedientes eran sobre situaciones del mundo real, y los médicos trataban a los pacientes según lo que juzgaran mejor, anotó Edelman.
"Una cosa es realizar un ensayo sobre un fármaco y seleccionar a los pacientes con cuidado para ver cómo rinden los medicamentos, y otra es observar para ver cómo le ha ido a la gente en el mundo real con médicos reales", señaló.
Los investigadores hallaron que alrededor del 37.3 por ciento de las personas murieron mientras usaban agonistas beta solos, en comparación con el 36.4 por ciento de las personas que usaron la terapia combinada.
Se produjeron resultados similares en cuanto a las hospitalizaciones provocadas por la EPOC: alrededor del 30.1 por ciento entre las personas con el medicamento solo, frente al 27.8 por ciento de las personas que tomaban la combinación.
En general, el uso de la terapia combinada redujo el riesgo de muerte u hospitalización en un 3.7 por ciento, frente a los agonistas beta solos, halló el estudio.
La mayor diferencia fue entre los pacientes de EPOC que también habían sido diagnosticados de asma. En general, los que tomaron la terapia combinada tuvieron una reducción del 6.5 por ciento en el riesgo de muerte u hospitalización, en comparación con los que tomaron un solo fármaco.
Pero los investigadores anotaron que la terapia combinada pareció ser menos efectiva para las personas que usaban un anticolinérgico inhalado de acción prolongada, una clase distinta de medicamento para el EPOC que funciona al inhibir la transmisión de ciertos impulsos nerviosos para ayudar a revertir la resistencia en las vías respiratorias.
Los que recibieron la terapia combinada y nunca habían tomado un anticolinérgico de acción prolongada tuvieron una reducción del 8.4 por ciento en el riesgo de muerte u hospitalización.
Es probable que los hallazgos tranquilicen a la mayoría de médicos, al confirmar que ya están haciendo lo correcto, dado que muchos ya recetan la terapia combinada, señaló el Dr. Darcy Marciniuk, ex presidente inmediato del Colegio Americano de Médicos del Tórax (American College of Chest Physicians) y director de la división de respirología, atención crítica y medicina del sueño de la Universidad de Saskatchewan en Saskatoon, Canadá.
Antes de controlar la muestra de pacientes con fines de investigación, los investigadores canadienses determinaron que los médicos habían iniciado a 34,289 pacientes nuevos en la terapia combinada durante el periodo en cuestión, frente a 3,258 a quienes solo se recetaron agonistas beta.
"Alrededor de diez veces más personas comenzaron con la terapia combinada que con la terapia de un solo fármaco", aseguró Marciniuk. "Eso habla por sí mismo".
FUENTES: Andrea Gershon, M.D., M.Sc., Sunnybrook Health Sciences Center and the Institute for Clinical Evaluative Sciences, Toronto; Norman Edelman, M.D., senior medical advisor, American Lung Association; Darcy Marciniuk, M.D., F.C.C.P., immediate past president, American College of Chest Physicians; Sept. 17, 2014, Journal of the American Medical Association.